El acuerdo de la Conmebol era claro, todas las federaciones sudamericanas debían votar por la candidatura conjunta de Estados Unidos, México y Canadá para ser sede del Mundial de 2026, algo que todos cumplieron, excepto Antonio Nunes, presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol.
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Es por eso que el resto de los presidentes del subcontinente no lo quieren ver. Según informa el diario Globo, el organismo con sede en Asunción buscará sancionar a Nunes, quien no se apareció en la inauguración de la Casa de la Conmebol durante el Mundial de Rusia, al igual que ningún dirigente brasileño.
Eso sí, la idea de votar por la candidatura de Marruecos fue solo de Nunes. “Fernando Sarney (vicepresidente de la CBF) fue muy elocuente al decir que Brasil mantiene la postura y que la decisión de votar en contra fue de una persona, no de la institución”, señaló Alejandro Dominguez, presidente de la Conmebol.
La idea de Sudamerica era votar en bloque, para que así los países de la Concacaf «devolvieran la mano» ante una posible postulación entre Argentina, Uruguay y Paraguay para el 2030, algo que se complicaría luego del voto de Nunes.
Precisamente el presidente de la Asociación de Fútbol Argentino, Claudio Tapia, fue el más dura y señaló que no comparte «la decisión que ha tomado. Uno está más cerca de la traición que de la simpatía”.
Según el medio brasileño, la sanción que recibiría Nunes será muy similar a la impuesta a Marco del Polo Nero, quien fue castigado por corrupción y no podía viajar al extranjero por Conmebol.
