Portugal es Cristiano Ronaldo y diez más. Al menos así ha quedado demostrado en los dos primeros partidos del Mundial de Rusia 2018, donde ha marcado todos los goles de su selección en el empate a tres tantos ante España y la victoria por 1 a 0 ante Marruecos, que los dejó muy cerca de clasificar a los octavos de final.
Por lo mismo, al tener una Cristiano dependencia, los lusos sufrieron más de la cuenta ante los marroquíes para amarrar la victoria y terminaron defendiendo la mínima victoria. Un sufrimiento que tuvo al presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, entre las cuerdas y que los llevó a enviarles un mensaje a los seleccionados: «se tienen que convencer que son los campeones de Europa y que la pelota no quema. Es bueno que anoten en los primeros cinco minutos, te da otra seguridad, pero sufrí tanto que casi me dio un infarto»
«Dimos un gran paso y pese a sufrir, estoy muy feliz. Le dijo eso a los jugadores y da para darse cuenta que están muy motivados. Ellos son los primeros en darse cuenta que el próximo partido tiene que ser mejor, que no basta con ganar, que tienen que jugar bien, mejor que hoy (ante Marruecos)», concluyó.
Ahora, Portugal saldrá a buscar la clasificación a octavos de final en la tercera fecha del Grupo B, cuando enfrenten a Irán, el próximo lunes 25 de julio en Saransk, a contar de las 14:00 horas.
