Griezmann revela una pillería a la uruguaya que le enseñó Martín Lasarte en la Real Sociedad

Sabido es que Antoine Griezmann vivirá un partido especial este viernes en Nizhny Novgorod cuando con la selección de Francia enfrente a Uruguay por los cuartos de final de Rusia 2018. La estrella de Les Blues tiene un fuerte apego por la cultura charrúa y gran parte de eso pasa por un viejo conocido del fútbol chileno, Martín Lasarte, y por distintos compañeros charrúas que ha tenido en su carrera, tales como Carlos Bueno en la Real Sociedad, o Diego Godín y José María Giménez en el Atlético de Madrid. 

Sin embargo, es el ex entrenador de la U y la UC su nexo más fuerte, ya que lo hizo debutar a los 18 años en el fútbol profesional en aquella Real Sociedad que tenía a Claudio Bravo como una de sus figuras. Machete guió al francés en sus inicios a punta de consejos cargados de folclore rioplatense y el propio jugador así lo recuerda.

En entrevista con L’Equipe, Griezmann reveló una anécdota con Lasarte para eplicar su devoción por Uruguay. «Me tocó enfrentarme a un defensor duro en el marcaje, Weligton (brasileño del Málaga). Martín Lasarte me dijo: ‘Si empieza a molestarte mucho, tomas un trozo de pasto y se lo lanzas al cuerpo y le dices: ‘Ahora te lo comes‘. Y así lo hice en la primera entrada que sufrí, reproduciendo justo esas palabras. Me sentí liberado», contó.

«No digo que estuviese bien lo que hice, pero también es bueno estar poseído por esa especie de rabia», continuó con su relato el delantero de 27 años, quien será titular en el ataque de Francia para enfrentar a la Celeste del Maestro Tabarez en la fase de ocho mejores de la Copa del Mundo.

Más allá de aquella anécdota, Griezmann dijo que admira la forma en cómo viven los uruguayos el fútbol. «Adoro cuando todo el mundo ataca y defiende. Sean Suárez o Cavani, los uruguayos acosan a su rival cuando pierden el balón. Y hacen entradas para recuperarlo. Me encanta».

Y por si eso fuera poco, el crack colchonero sostuvo que su veneración hacia la cultura uruguaya va mucho más allá del fútbol. «Me atraen los ritmos latinos y, sobre todo, sus sonrisas. Eso me ha marcado. En Europa le damos muchas vueltas a las cosas, lo complicamos todo y nos estamos quejando todo el día», declaró.