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O’Higgins se impuso por la cuenta mínima a Everton en un apretado partido en el debut de su nuevo entrenador, Mauricio Larriera. El cuadro ruletero también estrenó técnico nuevo, Javier Torrente, y aumentó una negativa racha de catorce partidos sin ganar que los tiene colistas del torneo.
El partido comenzó con mucha intensidad y en apenas cuatro minutos de juego, un tiro de esquina de Nicolás Oroz le permitió al capitán celeste, Albert Acevedo, anotar de cabeza el único tanto del partido ante un debutante Cristopher Toselli en el cuadro viñamarino. Los Oro y Cielo no bajaron los brazos y en 21 minutos el también debutante Álvaro Ramos ejecutó una chilena que exigió una buena atajada de Miguel Pinto.
La polémica se instaló en 40 minutos, cuando en un conflicto entre Benjamín Rivera y el debutante Maximiliano Salas terminó expulsado, desatando las quejas del banco rancagüino ya que Cesar Deischler le puso roja directa a Salas mientras que las cámaras demostraron que no hubo agresión.
La expulsión de Salas obligó a Larriera a hacer ingresar a Matías Sepulveda por Pedro Muñoz en el entretiempo, mientras que Torrente aumentó la ofensiva y reemplazó a Diego Orellana por el mexicano Marcos Bueno.
En la segunda mitad, Ramos no aprovechó un error de Acevedo el contragolpe y desperdició inmejorable ocasión para anotar el empate, ya que definió muy recto frente a Miguel Pinto y desperdició la igualdad en 70 minutos de juego. Más tarde, una mano de Roberto Cereceda en el 78’ no fue visto en un nuevo error del árbitro Deischler.
El resultado complicó al cuadro de la quinta región, que marcha último con 9 puntos y deberá sumar con urgencia en su próximo compromiso contra Deportes Iquique. Por otro lado, O’Higgins se mantuvo en el séptimo puesto con 26 unidades y sueña con clasificar a la posición de Copa Libertadores, a 4 puntos de distancia, mientras que deberán enfrentar a Unión la Calera en la siguiente fecha.
