Se supone que a los 40 años un jugador de fútbol ya está en las últimas, quizás defendiendo su última camiseta y probablemente en algún club inferior, quemando los cartuchos finales y mirando con nostalgia el esplendor de su carrera. Sin embargo, el caso del portero italiano Gianluigi Buffon escapa al paradigma.
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Con cuatro décadas a cuestas y habiendo debutado en 1995 con 17 años en el Parma, fue contratado por el Paris Saint Germain por un año, ampliable a otro opcional. Aunque llegó como agente libre al elenco parisino, tras no renovar contrato con la Juventus, su pase estaba tasado por 2 millones de euros. Sin embargo, su sueldo es estratosféricamente distinto: el italiano recibirá 410 mil euros al mes. O sea, casi 5 millones de la divisa europea por 12 meses, según informó el diario francés, L’ Equipe.
En pesos chilenos, el portero ganará 318 millones mensuales y en un año serán poco más de 3800 millones de la moneda nacional. El matutino deportivo galo indicó que el sueldo de Buffon se justifica porque «es un salario digno por su renombre mundial y popularidad», además del ahorro que significó ficharlo como libre.
Un fin de carrera soñado para cualquier futbolista, en plena élite mundial.
