Para muchos de los hinchas de Colo Colo fue una sorpresa el cambio de esquema que realizó el entrenador Héctor Tapia para enfrentar a Corinthians, en el duelo de ida de los octavos de final de Copa Libertadores. Sin embargo, la movida le resultó a la perfección al DT y sus jugadores llevaron a cabo todo lo trabajado para el duelo.
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Tal como lo anunció El Gráfico Chile, Tapia presentó un 1-3-4-1-2, esquema habitual del ex entrenador del Cacique, Pablo Guede, pero que con el ex delantero tuvo matices mejorados y bien trabajados, especialmente, en la zona defensiva.
Si bien a Colo Colo le costó acomodarse los primeros 15 minutos, después, simplemente doblegó por todos los sectores al Timao. Finalmente el 1-0 terminó siendo mezquino para el Cacique.
Defensa sólida
La línea de tres, por varios pasajes fue de cuatro defensores, donde Carlos Carmona se ubicaba entre los centrales. Esto, porque tanto Óscar Opazo como Damián Pérez se dedicaron a labores ofensivas, donde demostraron un gran despliegue físico, ya que fue así como desbordaron constantemente a sus rivales. Además, se pusieron el overol al momento de contener, para conformar una línea de cinco defensores.
La solidez defensiva estuvo liderada por Julio Barroso. El líbero ordenó constantemente a su zaga, la cual nunca quedó mal parada ante los rivales y ganó casi todos los mano a mano. Matías Zaldivia demostró su gran nivel, que lo tiene entre los mejores centrales de la temporada, y Juan Manuel Insaurralde, mostró que es un jugador copero y que estos partidos, los juega sin presión.
Equilibrado mediocampo
En el mediocampo la idea de Tapia se cumplió a cabalidad. Los laterales – volantes desbordando constantemente, Carlos Carmona colaborando con la defensa y Claudio Baeza, siendo el socio de todos en la zona media.
A eso, se sumó la tranquilidad y madurez de Jorge Valdivia, quien nuevamente, demostró ser un jugador de un nivel superior al resto de los futbolistas que militan en el fútbol chileno.
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El Mago manejó los tiempos del partido a su antojo. Pidió constantemente el balón, se asoció con sus compañeros y deleitó con su talento en los pases entrelíneas. Como era de esperar, de sus pies, nació la jugada de la única cifra del partido.
Las dos «torres» de arriba
En ofensiva, Lucas Barrios fue quien se sacrificó, entendiéndose a la perfección con Esteban Paredes. El fiel reflejo de la gran sociedad que hace esta dupla fue en el gol. El Tanque hizo la pantalla para permitir el remate de La Pantera, que contuvo a medias Cassio y le permitió a Carmona anotar.
Un partido bien estudiado, bien trabajado y en el cual, Tapia quedó completamente satisfecho, ya que cada movimiento ensayado en la previa, resultó a la perfección.
«La idea del cambio de esquema era para tratar de tener a nuestra líneas defensiva bien avanzada, crear una presión constante en el juego de Corinthians, tener a nuestros laterales volante avanzados para alimentar a nuestros delanteros y que nuestros volantes tuvieron el control del juego y lo que se practicó, se llevó a la perfección en todos los aspectos del juego», terminó expresando Tapia tras el magnífico partido disputado po Colo Colo, en el cual, sometió a los brasileños quienes deben agradecerle a su arquero, Cassio, de no haberse ido del Monumental con una derrota más abultada.
Con una idea similar irán a la revancha, la que se jugará el 29 de agosto en Sao Paulo.
