El ciclo más exitoso de la selección colombiana llegó a su fin, luego de que el entrenador argentino José Néstor Pekerman no renovara su contrato, partiendo de un país al que llevó a dos Mundiales de forma consecutiva.
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El argentino se fue muy molesto del país cafetero, donde fue apuntado y criticado, debido a que se especuló que estaba negociando con la selección de Argentina, aún cuando tenía contrato con el cuadro tricolor.
A la hora de su partida, el ex DT de las divisiones inferiores de Colo Colo señaló que «no hubo desacuerdos. No hubo ningún tipo de condicionamientos. Le han hecho mucho daño a la selección. Ojalá todos se unan. Apoyen a la selección desde el lugar que esté. La cantidad de mentiras y barbaridades que se dijeron de mí… pocos países hacen eso. Es una decepción muy grande«.
No se quedó ahí, porque agregó que «yo no me ofrezco a ningún lado. Espero que se acabe mi contrato, no empiezo a hablar con otras selecciones. Mi asistente no atiende a nadie, porque le corto la mano. Vivo en Colombia permanentemente. No salí de Bogotá. Solo estuve por fuera del país cuatro días».
Pekerman recordó un triste episodio que vivió en su etapa en el elenco tricolor, cuando en 2014 perdió a su madre, pero se mantuvo firme en el cargo y no abandonó su trabajo.
«En este proceso perdí a mi madre, no pude estar. Casi no puedo continuar y siempre el compromiso estuvo primero», argumentó.
Colombia se quedó sin pan ni pedazo, porque tras la partida de Pekerman no tienen a un reemplazante claro, porque a los que querían, Reinaldo Rueda y Juan Carlos Osorio, tienen contratos vigentes con Chile y Paraguay, respectivamente.
