Caras largas había en el camarín de Colo Colo tras el empate a uno ante O’Higgins en Rancagua. La poca capacidad ofensiva, a pesar de tener tres delanteros nominales y que en la primera falla defensiva, los celestes aprovechen el boquerón y abran la cuenta, tiene intranquilas a las huestes albas.
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Uno de lo más amargados era Hector Tapia. El entrenador de Colo Colo, sumará otra semana más en entredicho con la directiva y la hinchada. Tras el encuentro, dio sus impresiones a la transmisión oficial: «Creo que se hizo una buena semana de trabajo, con mucha disposición de revertir y mejorar nuestra campaña. Lamentablemente no lo logramos y es un empate con sabor absoluto a derrota», admitió.
Tito reconoció que esto incomodará a la interna del plantel, pues la idea era llevarse el triunfo: «Fue un partido parejo, tuvimos las ocasiones más claras, pero que no pudimos convertir. Necesitábamos un triunfo para cambiar un poco la cara», dijo.
Otra vez la Libertadores
Tapia asumió que avanzar e intentar superar las instancias finales en la Libertadores, fue mermando la capacidad física y futbolística de sus jugadores, hecho lógico, sumando la edad de varios de ellos, que superan los 30 años: «El llegar a las instancias que llegamos en Copa Libertadores, nos restó (en el campeonato local). Hubo varios desgastados, lesionados, suspendidos y en eso fuimos enredando puntos que nos llevan a estar en la posición que estamos», puntualizó.
Siguen los cuestionamientos en el Popular y al parecer, todo indicaría que los albos tendrán un final de año no muy feliz.