Siempre para los clásicos se saca a colación una frase que se usa hasta el olvido: «no importa cómo venga el rival, los clásicos son diferentes». Y así, casi como con el libreto hecho, el delantero de la puntera Universidad Católica, Sebastián Sáez, adelantó el encuentro que jugarán este sábado ante Universidad de Chile, a contar de las 12:00 horas en el estadio Nacional.
PUBLICIDAD
«La U es un rival difícil, un clásico, no importa cómo viene uno u otro, es un partido diferente. Hay que hacer las cosas muy bien para poder quedarnos con el triunfo», indicó.
Es tanto el respeto de la UC hacia la U que ni siquiera las bajas de su rival, quienes no podrán contar, por ejemplo, con el suspendido Jean Beausejour, o el hecho de ser los líderes del Campeonato Nacional les hace creerse favoritos, tal como precisó Sáez este martes en conferencia de prensa.
«Son situaciones que todos los equipos enfrentan. A nosotros nos tocó en el partido pasado, jugamos con muchas bajas, entonces, si la U juega con bajas, tendrán otros jugadores para poner, tal como lo hicimos nosotros con la U. de Concepción con los casos de Marcos (Bolados) y Andrés (Vilches), que no venían jugando mucho», dijo.
El título y los «puntos» del Chapita
Sáez no desconoce que están cerca del objetivo de ser campeón, pero lo primero es vencer a la U, a sabiendas de la dificultad que están teniendo para abrochar los duelos de visita, donde no consiguen ganar hace seis meses.
«Obviamente que está un poco más cerca porque son menos los partidos que nos quedan, pero ahora vamos a enfrentar a un gran rival, un clásico, y no pensamos más allá del partido a partido (…) Sé que está ahí la estadística de que hace mucho no ganamos de visita, quizás este es un buen momento para romper esa racha», puntualizó.
Consultado, además, sobre el estado de José Pedro Fuenzalida, quien sufrió una herida en su cabeza en el duelo ante el Campanil, el Sacha se lo tomó con humor: «Con la cantidad de puntos que tiene salimos campeones ahora y en el torneo que viene. Está bien, obviamente entrenó diferenciado, esa bien de ánimo. La parte médica es la que puede entregar más detalles».
Finalmente, sobre su actual sequía goleadora, el delantero se mantiene tranquilo y confiado en revertir el momento: «Estoy tranquilo, sé que el gol en algún momento va a llegar, siempre he pensado que lo más importante es el equipo, hoy me toca sacrificarme y por suerte mis compañeros están convirtiendo. Acá no importa quién haga los goles, sino que el equipo gane, ahora le tocó a Andrés (Vilches) y ganamos los tres puntos», finalizó.
