Expectante se encuentra el árbitro chileno Roberto Tobar, tras haber sido designado por la Conmebol como el juez que impartirá justicia en la final de ida de la Copa Libertadores, en el Superclásico entre Boca Juniors y River Plate.
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Este próximo sábado será la cita en el estadio La Bombonera, en una instancia inédita en este certamen continental. El colegiado, en conversación con Radio Agricultura, reconoció su felicidad por el llamamiento: «Había hablado con mi señora de la posibilidad de una final, pero no tenía la certeza. Si se daba, bien, si no, a esperar. Cuando nos avisó un vecino, nos abrazamos con una felicidad inmensa».
Respecto a cómo espera que se desarrolle el encuentro, el chileno agregó que «los primeros minutos marcarán la pauta de cómo será el juego y eso es algo que también planificamos. Confío en que ambos equipos se dedicarán a jugar, o si no tendremos que empezar a proceder en base al reglamento».
Sobre la preparación para este trascendental encuentro, Tobar avisó que este jueves llegan a Buenos Aires. «Ahí continuaremos analizando videos y trabajando con los profesores internacionales que tenemos. Tenemos un sistema de concentración bastante estricto. Uno trata de no escuchar mucho lo que es prensa o lo que digan personajes importantes del país», puntualizó.
Por último, en relación al uso del VAR, el árbitro nacional fue enfático en recalcar las bondades de este sistema. «Nos favorece bastante, ya que, por el desgaste físico, muchas veces no puedes conseguir la mejor ubicación. El VAR te da ese ángulo, esa tranquilidad para determinar, por ejemplo, si es penal o no, y así tomar una decisión más justa», cerró.
