En el entrenamiento del día lunes, el técnico de Tigres, Ricardo «Tuca» Ferretti, tuvo un duro altercado con Eduardo Vargas y el brasileño Carioca, a quienes separó del plantel tras recriminarlos en duros términos, según dio a conocer la prensa de Monterrey.
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Un día después del incidente, el presidente del club, Miguel Ángel Garza, minimizó el conflicto, al asegurar que «a este tipo de situaciones tratamos de sacar lo positivo, es cuestión de unificar criterios y que todos halen al mismo rumbo. Son cosas que competen al fútbol y lo dejamos en decisiones internas».
Garza reconoció que no existirán multas ni sanciones para nadie y que el incidente queda como una anécdota de las tantas que ha tenido Ferretti en su paso por Tigres.
«Ese tipo de fricciones se dan por la exigencia que pide el cuerpo técnico en cada entrenamiento. Ya hablamos todos y queda ahí registrado para el recuerdo, para nosotros valen más los integrantes del plantel y el cuerpo técnico que las críticas, lo sucedido lo vemos como una situación normal», dijo.
En tanto, el defensor Hugo Ayala negó que el vestuario del equipo esté roto por el episodio vivido por Ferretti con Carioca y Vargas.
«Son situaciones que acontecen por la exigencia en las sesiones. Creo que no debe pasar de un momento de tensión. Todos estamos en el mismo barco y vamos a halar parejo. Somos un club de calidad y al mismo tiempo de presión por sacar resultados, de ahí que se deriven estas cosas», señaló.