Joaquín Niemann tuvo una impecable reacción este viernes, que le permitió superar el corte en The RSM Classic, su undécimo consecutivo en el PGA Tour desde que es profesional.
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De esos once cortes, este que peleó en Sea Island fue emocionante y se vivió a flor de piel. Porque cuando enfrentaba sus primeros nueve hoyos el panorama obligaba al chileno hacer dos birdies y la tarea subió de nivel cuando se corrió el corte y Joaco debía embocar no dos, sino tres.
Niemann es un jugador con oficio y no embocó dos ni tres birdies, sino que cuatro en total. Todos de manera consecutiva, como si dudas quedaran al respecto. Brutal.
Cuando la chispa se prende en el golf, no hay cómo apagarla y sobre todo si se trata de Niemann. Ayer su pólvora estaba mojada. Este torneo se juega en dos canchas: Seaside y Plantation, siendo claramente la segunda mencionada mucho más accesible que la primera.
Por ejemplo, de las mejores 15 tarjetas de la jornada de ayer, 13 se lograron en Plantation. Así Joaco enfrentaba un duro desafío en Seaside, en un duelo contra el campo duro y donde terminó siendo un killer con un final de cuatro birdies en los últimos cinco que le permitió firmar una tarjeta de 66 (-4).
De esa manera, Niemann quedó, momentáneamente, 46° en el tablero y con un datazo para despedirse de este tremendo año en el PGA Tour. Este es su último torneo regular del calendario en el 2018 del circuito y en los últimos once eventos ha superado el corte.
Además, el comienzo de la temporada la ha terminado de manera invicta. Otra huella bien marcada por el chileno, que intentará mejorar aún más sus registros este fin de semana en Georgia.
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