Los graves problemas de seguridad, el ataque de los barristas al bus de Boca Juniors y todos los incidentes en el Monumental para la final de vuelta de la Copa Libertadores ya dejaron a su primer caído. Martín Ocampo, quien desde diciembre de 2015 era el ministro de Seguridad del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, renunció a su cargo después de los grandes cuestionamientos que se hicieron a la gestión previa del encuentro entre River Plate y los Xeneizes.
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Según consignó el medio argentino Olé, Ocampo fue duramente fustigado por el fallido operativo de seguridad, donde llamó la atención la escasa presencia de vallas papales en el trayecto del bus y también de efectivos policiales.
Una decisión que, de todas formas, se esperaba que ocurriese, debido a que varios personeros del gobierno federal estaban pidiendo la cabeza de Ocampo. Asimismo, se rumorea que el reemplazante en el cargo sería Diego Santilli, vicejefe de Horacio Larreta, actual gobernador de Buenos Aires.
Previamente a la renuncia, Patricia Bullrich, ministra de Seguridad de la Nación, había defendido públicamente al Ocampo y aseguró que no hubo zona liberada por la policía en el lugar de la agresión que sufrió el bus de Boca en su llegada al Monumental de River para la final de vuelta de la Libertadores.
