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El domingo recién pasado, Universidad de Chile tenía la gran oportunidad de seguir en la lucha por el título y así obligar a definir todo en una eventual y electrizante última fecha con tres equipos peleando el título: Universidad Católica, Universidad de Concepción y la U.
Sin embargo, el empate a cero de la U ante Deportes Iquique los bajó de la pelea y los dejó sin opción de conseguir la ansiada estrella 19. Ahora, sólo los Cruzados y los del Campanil tendrán la chance de ser campeones.
Antes del encuentro, las siempre odiosas comparaciones se hicieron notar por un factor común: la UC era líder y la U venía remontando desde atrás, tal cual como ocurrió en el recordado 1994.
El desglose es el siguiente: en este 2018, los azules completaron cinco triunfos consecutivos dede la fecha 24 hasta la 28 para quedar en el segundo lugar y a sólo dos puntos de los dirigidos por Beñat San José, tomando el sorpresivo cartel de candidato al título cuando, meses atrás, nadie lo hubiese creído.
En 1994, la UC llegó a estar siete puntos arriba de la U. En la fecha 25, sin embargo, el cuadro revelación de ese entonces, el desaparecido Regional Atacama, venció dos a uno a los cruzados del Beto Acosta y Gorosito. Los laicos, comandados por un joven e inspirado Marcelo Salas, siguieron su racha triunfal y en la jornada 27 ganaron el Clásico Universitario por la cuenta mínima y pasaron arriba en la tabla. Todo se definió en la última fecha con el recordado penal de Patricio Mardones y aquellos 25 años que les costó salir campeón se olvidaron con ese «milagro en el desierto».
Hablan los protagonistas
Para ver si existen parangones entre uno y otro equipo, El Gráfico Chile conversó con tres ex jugadores de la U: Patricio Mardones, Rodrigo Golberg y Cristián Castañeda, quienes analizaron las diferencias entre la Universidad de Chile 1994 y 2018.
El primero en hablar fue Mardones, el mismo del mítico penal del empate con Cobresal en la última fecha: «venía haciendo un torneo regular en las últimas fechas y eso ilusionó a todo el mundo por haber opciones para ser campeón (…). El equipo de 1994 tenía mucho más tiempo de trabajo, no es que sea tremendamente superior», argumentó.
Opinión un poco más distante tuvo Rodrigo Goldberg. El ex delantero, ahora rostro y comentarista deportivo, reconoció que en su época de futbolista, le cargaban ese tipo de ejercicios comparativos, sobretodo con otro mítico equipo azul, como fue el Ballet. Pero que ahora, viéndolo desde afuera, entiende un poco las diferencias entre uno y otro.
«No me gusta hacer comparaciones, pero creo que en la dinámica de puesto por puesto, además de la cuestión colectiva, hay un asunto individual que le aporta mucho y lamentablemente esta U no supo definirla (…) a mí me cuesta entender a qué juega esta U. Creo que apostó por algo más seguro y no tan desequilibrante», dijo el Polaco.
Más tajante fue el lateral y también ex seleccionado nacional, Cristián Castañeda. Scobby no tuvo mayores problemas en reconocer abiertamente la superioridad del plantel de 1994: «En esa época teníamos equipo, sabíamos a lo que jugábamos e, incluso, cuando íbamos perdiendo algunos partidos por más de un gol, éramos capaces de darlo vuelta. La U jugándose un título no pateó un tiro al arco. Al final yo creo que es un problema de capacidad», precisó el hermano de Víctor Hugo.
Y si se quiere hilar más fino, los números no mienten. La U de 1994 fue campeón con un 82% por ciento de rendimiento. 21 encuentros ganados, 7 empates y solo 2 derrotas. La U modelo 2018, hasta esta penúltima fecha, lleva 17 encuentros victoriosos, 3 igualdades y 9 caídas. Juzgue usted.
