Las dudas por la continuidad de Reinaldo Rueda en la banca de la Selección chilena estaban instaladas, tras el anuncio de Arturo Salah de no postularse nuevamente a la presidencia de la ANFP. Esto porque el colombiano llegó a la Roja a principios de 2018 gracias a la gestión del ex futbolista al mando del fútbol nacional.
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Esto porque la era Rueda estaba totalmente relacionada a Salah y su gestión, por esto la cita de este jueves en la sede de Quilín era fundamental para el futuro del técnico en nuestro país. En caso de perder la lista de Sebastián Moreno, quien lideraba el «continuismo», la estadía del caleño en Chile podría sufrir un duro golpe hasta provocar su salida.
Sin embargo, en una reñida definición, Moreno se quedó con el triunfo sobre Jorge Uauy y le dio respiro a Rueda, que ahora podrá seguir trabajando con la gente que lo trajo a nuestro país.
«Tengo la ilusión de seguir», dijo Rueda hace dos semanas antes del amistoso con Costa Rica y también dejó dudas de su continuidad en el caso de que la lista que seguía la línea de Salah dejaba el sillón de Quilín.
«Mientras no haya una decisión, mi propósito es seguir acá, con las garantías que nos ofrecen a nuestro cuerpo técnico, con la tranquilidad y el respeto que nos ha dado este directorio«, dijo. Además, el colombiano expresó que «si no hay feeling (con los que lleguen a la nueva directiva), lo único seguro que tenemos los entrenadores, es la maleta a la salida«.
Y así fue, porque Moreno tras su victoria reconoció que el puesto de Rueda no corre peligro: «Reinaldo tiene un contrato, que está destinado a un mediado y largo plazo. Es un hombre que respeta los procesos y tiene todas las garantías para trabajar en los objetivos trazados, lo que tiene que ver con la Copa América del próximo año y las Clasificatorias al Mundial de Qatar 2022«.
Ahora Rueda tiene el respaldo del «continuismo», por lo que su estadía en la Selección está más segura que nunca.
