Capítulo tres mil de la interminable teleserie River Plate vs. Boca Juniors. Y quizá el más insólito de todos. La Conmebol informó que la desastrosa final de la Copa Libertadores finalmente se jugará en Europa, porque la sede elegida fue el Estadio Santiago Bernabéu de Madrid.
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El organismo sudamericano informó el pasado martes que el partido de revancha no se iba a disputar en Argentina, porque el país no cumplía con los requerimientos mínimos de seguridad, por ende empezaron a buscar opciones, y la que ganó fue finalmente la española.
Aparte de Madrid, sonaron fueron las ciudades como Medellín, Asunción, Miami y hasta Doha, pero los regentes del fútbol de este lado del mundo se inclinaron por el estadio del cuadro merengue.
Aparte de confirmarse la sede, se informó que el partido se desarrollará el domingo 9 de diciembre, a las 16:30 horas de Chile. Es decir, la Conmebol deberá crear un operativo mayor para jugar en el Viejo Continente.
El acuerdo fue total entre todos los involucrados, porque participaron en la negociación Conmebol, FIFA, la Federación Española de Fútbol y el Real Madrid, que justamente ese día juega de visita ante Huesca.
Por ahora hay estadio, pero no se sabe si el partido se jugará, porque Boca Juniors insiste con ganar por secretaría la Copa Libertadores 2018.