Finalmente Mauricio Pinilla le ganó el juicio a Azul Azul, quien deberá pagarle una indemnización cercana a los 460 millones de pesos tras el fallo del Juzgado de Letras del Trabajo de San Miguel.
PUBLICIDAD
El triunfo judicial no dejó indiferente al delantero, quien sacó la voz y disparó contra la concesionaria. «A mí me importaba recuperar la libertad para poder volver a trabajar. Con esta sentencia se limpia mi honor, porque se echan por tierra la tesis y las mentiras de Azul Azul», reconoció a El Mercurio.
«El tema económico es secundario, acá lo importante era que se restablecieran mis derechos para poder desempeñarme como jugador», agregó.
«Estoy feliz, porque esta resolución me permite quedar muy cerca de retomar la actividad. Esta sentencia, de hecho, implicaría que en estos momentos soy un jugador libre y podría firmar en algún club. Tenemos varias propuestas nacionales y extranjeras, pero mi prioridad es jugar en Chile y la próxima semana espero definir dónde lo haré», agregó.