La irregularidad es la palabra que mejor describe el pasar de West Ham United en la Premier League, porque el equipo de Manuel Pellegrini no encuentra un rumbo claro y ahora empató como local por 2-2 ante el modesto Brighton.
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El equipo del Ingeniero había levantado a fines de 2018, pero el fin de semana pasado cayó sorpresivamente ante Burnley y como anfitrión fue incapaz de enmendar el rumbo, incluso estuvo muy cerca de perder.
La visita pegó fuerte en Londres gracias a la pelota muerta, porque después de dos tiros de esquinas servidos por Pascal Gross, cayeron los goles de Dale Stephens y Shane Duffy, a los 56′ y 58′, respectivamente.
Pero el austríaco Marko Arnautovic vino al rescate de Pellegrini, porque demostró su olfato goleador para anotar desde área chica a los 66′ y 68′, para así decretar la paridad final.
Con la paridad West Ham sigue en la medianía de la tabla, más precisamente en el décimo lugar con 28 unidades, mientras que Brighton quedó 13º con 26.