Una vez consumado el fracaso de la selección chilena en el Sudamericano Sub 20, llega la hora del cruel y análisis. La Rojita se despidió con más pena que gloria del certamen tras una campaña que difícilmente puede escapar de la fuerte crítica. Y es que ante el pobre nivel futbolístico a lo largo del campeonato, donde Héctor Robles timbró otro papelón al mando de la selección en este tipo de torneos, los dueños de casa se quedaron sin el sueño de alcanzar la clasificación al Mundial de Polonia y los Juegos Panamericanos de Lima.
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Si bien hubo un destello de esperanza tras la victoria ante Brasil en la cuarta jornada por 1-0, el barco comenzó a hundirse con el pobre empate contra Bolivia en el arranque del certamen. Allí, Chile dio luces de su escaso argumento futbolístico, de su fuerte debilidad mental en situaciones adversas, y del bajo rendimiento físico de la mayoría del equipo.
Los especialistas apuntan al técnico como principal responsable del fracaso, pero asumen que también existe un grave trasfondo: La nula formación de cadetes. «Todos somos los responsables de cierta manera, unos más que otros, pero sí me encantaría que todos los jugadores tuvieran la posibilidad real de estar a nivel profesional, jugar en los estadios oficiales, con público, porque se les haría más común el tema», apunta Jonathan Orellana, ex DT de la sub 19 de Everton, actual bicampeón del fútbol chileno.
Pero el actual entrenador de Deportes Limache en la Tercera A, no pierde la esperanza. «Hay mucho por mejorar, hay materia prima, hay muchos jugadores, a nivel individual va mejorando el biótopo, es responsabilidad nosotros como profesionales prepararnos de la mejor manera. Tratar de actualizarse, para darle una mejor preparación porque la competencia es muy dura», agrega el entrenador, quien además reclama: «Nosotros jugamos seis finales, ganamos cinco, en un equipo de provincia es complicado. Pero teníamos más expectativas de que podía estar otro jugador, no solo Alex Ibacache. Nos hubiese puesto más contento si hubiese estado Matías Leiva o Benjamín Rivera».
José Sulantay, ex DT de la Sub 20 en los mundiales de Holanda 2005 y Canadá 2007, donde logró el tercer lugar, golpea la mesa: «Es un crimen todo lo que se ha perdido estos años. Cuando fuimos a Holanda en 2005 después lo ratificamos en Canadá, fue un trabajo profundo, preparamos jugadores. En la historia, jamás una selección sub 20 abrió tantas puertas a los jugadores chilenos en el extranjero. Sin duda que se tiene que mejorar el trabajo en cadetes, solo se prepara para ganar el domingo entre nosotros. No se piensa en los otros aspectos, aquí se critica sin saber, todos me criticaron cuando dije que había que mejorar la estatura, y ahora ahí está el tema en la adulta», dispara.
El ex entrenador de Coquimbo y Cobreloa, también dispara contra Héctor Robles por el rotundo fracaso. «Él tiene que tener fortaleza para aceptar la crítica, es bueno aceptar las críticas. Sin ser tozudo, él debió defender su idea y lo mejor para eso es convencer a los jugadores, creo que él también deberá sacar sus propias conclusiones», subraya Sulantay.
Para César Vaccia, seleccionador sub 20 en el Sudamericano 2011, «Evidentemente siempre es responsable el entrenador, pero los jugadores nuestros tienen una cuota de responsabilidad, y deben estar a la altura de las circunstancias. Hay tres o cuatro jugadores que debieron mostrar más jerarquía, porque el resto de los chicos juegan a nivel sub 20 en Quilín, en otras condiciones. Es evidente que los jugadores maduran más tarde. Se ha hecho un buen trabajo. Uno también depende mucho de la generación de jugadores que le toque, porque si me preguntas cuál de estos jugadores está para el cambio en la selección, yo creo que ninguno«, remata el ex bicampeón con la U.
