En el Mobile World Congress de Barcelona, la mayor feria de tecnología móvil del mundo, no todo es celulares. La realidad virtual, la tecnología 5G y la inteligencia artificial, no solo están reservadas para el lanzamiento del smartphone de alta gama de turno, sino que también hayan espacio en otras cosas tan atractivas y populares como el fútbol.
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Este martes, de hecho, desde el stand del Mobile World Capital, el Fútbol Club Barcelona aprovechó la feria para anunciar al Camp Nou como el primer estadio 5G del mundo. El equipo catalán desplegó una serie de antenas con las cuales realizaron una demostración en vivo, con resolución 4K y en realidad virtual desde la parte más altas de las graderías del estadio.
Además, desplegaron una demostración similar desde la cancha de entrenamientos, desde donde se pudo ver en directo la salida de los jugadores del primer equipo, Arturo Vidal incluido, y dar la impresión, gracias a las gafas VR, de que las personas tenían una vista en 360° desde el mismo campo de juego.
A otro nivel
«La Liga española es considerada la mejor del mundo desde hace varios años y mucho de eso tiene que ver la tecnología que nos hemos propuesto entregar para los clubes, aficionados y equipos técnicos», dice Carlos Ruiz-Ocaña, responsable de asuntos corporativos de LaLiga.
Desde el RCDE Stadium de la ciudad de Barcelona, donde hace de local el Espanyol, la liga de fútbol aprovechó de lanzar su Innovation Showcase, evento para mostrar los últimos avances tecnológicos aplicados al balonpié.
«Uno de los últimos avances pensados para el público es el Replay360°», explica Ruiz-Ocaña. El sistema de repetición de jugadas se basa en múltiples cámaras ubicadas en distintos sectores de un estadio, y que permiten congelar, cambiar la perspectiva, e incluso situar la panorámica de una jugada desde la visión del arquero.
Al fútbol también llegaron las plataformas de monitoreos de datos, que vienen a suplir la clásica labor de los encargados de revisar videos y armar compactos sobre rivales y jugadas de interés. En el caso de LaLiga, desde 2010 implementaron MediaCoach, una plataforma que registra y contabiliza prácticamente todo.
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A ella pueden recurrir todos los equipos de primera y segunda división de España, y registra desde la cantidad de metros que corrió un jugador, a qué velocidad desbordó por la banda y cuantas fueron las desatenciones de la última línea, por ejemplo. La plataforma también permite hacer los compactos de jugadas clave con apenas un par de clics, o recopilar todas las intervenciones de un determinado jugador con sólo marcar una casilla.
«Toda esta información dispuesta para los clubes ha sido un soporte vital. Incluso con esto hemos podido confirmar la tendencia que se repite y predomina en el fútbol: defender con línea de 5 y atacar con tres», dicen desde LaLiga.
En la cancha, pero desde el sillón
A menos de 5 metros de distancia se puede observar el gol que anotó de cabeza de Arturo Vidal al Real Madrid, gracias a los lentes de realidad virtual que Mediapro dispone. En España, dicha empresa pone 5 cámaras 360º en los estadios, dos veces por fin de semana, y libera a las pocas horas de terminado el encuentro clips de poco más de 5 minutos para que usuarios puedan revivir las mejores jugadas literalmente dentro de la cancha. Eso, gracias a la tecnología Oculus. «La idea es entregarle a las personas una experiencia de inmersión que los lleve a vivir el encuentro como si estuvieran en el mismo campo», dicen.
Eventualmente, con la consolidación del 5G y su capacidad para transportar datos, en unos años se podría disfrutar de un Real Madrid-Barcelona en vivo, adentro de la cancha y en realidad virtual.
Miguel Mur, de Mediapro, también da cuenta de las mejoras que ha tenido el Var. Una de ellas es la llegada de la inteligencia artificial, que en España mejora la precisión de la línea del offside.
En LaLiga, el VAR dispone por norma de toda la producción televisiva. Allá los partidos clase A cuentan con a lo menos 30 cámaras, pero en ciertos duelos, como un clásico, incluso despliegan 32.
Ningún detalle queda al azar. También con un software e inteligencia artificial, la programación de los partidos se realiza en función de unas 70 variables. Cuanto sol habrá en ese momento, qué partidos se juegan puestos en Champions, las condiciones climáticas, entre muchos otros, se llevan a un computador que calcula el mejor día y hora para asegurar el máximo número potencial de asistentes al estadio. El algoritmo, además, no tiene más de 1%de margen de error.
