No son muchos los jugadores paraguayos que han pasado por Universidad Católica y menos todavía los que han dejado una huella en el club. Uno de los pocos que sí grabaron su nombre en la historia cruzada es Jorge Luis Campos, a quien le bastaron un par de temporadas en la precordillera para consagrarse en el Torneo Apertura 2002, donde, en el partido de vuelta de las semifinales, anotó un doblete para eliminar a la U.
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El bimundialista con la selección guaraní terminó su carrera como futbolista en su país, donde defendió a Libertad. Hoy dirige al Deportivo Recoleta, de la Tercera División paraguaya, y en su rol de entrenador le entrega su receta a la UC para el crucial duelo de este miércoles ante el Gumarelo por la Copa Libertadores, a contar de las 20:30 horas en San Carlos de Apoquindo.
¿Cómo anticipas el partido? Los dos equipos llegan muy bien…
He estado viendo los partidos. Es un grupo bastante difícil el que les ha tocado y seguramente va a ser un partido durísimo para la Católica, porque Libertad viene bien. Ojalá que sea lindo y que gane el que mejor preparado esté.
Libertad es duro de visita, le ganó a Gremio. Se para bien atrás y con los jugadores potentes que tiene arriba, te complica. ¿Crees que planteará el partido así?
Es un equipo bastante duro, con jugadores de mucha jerarquía, de peso, como Tacuara (Óscar Cardozo), Paulo (Da Silva) o (Antonio) Bareiro. Viene bien en la Copa, con un resultado muy bueno jugando de visita contra Gremio. Con el técnico que está ahora (José Chamot) está más solidificado y yo creo que lo va a plantear de la misma manera.
Tú estás de entrenador en el Recoleta de tu país. ¿Qué receta le darías a la Católica para contrarrestar a este Libertad?
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Que tiene que ser vertical, presionarlo, no dejarlo salir jugando, quitarle la pelota lo más rápido y arriba posible para poder agarrar mal parado a Libertad, algo que es bastante difícil, porque la línea de cuatro y los volantes se paran bien. Hay que atacarlo.
En el papel, Libertad asomaba quizá como el accesible del grupo y se ha transformado en potencia, con jugadores veteranos que siguen rindiendo. ¿Cuál es la fórmula?
Están bien preparados los chicos, a pesar de la edad de Paulo (39) o de Tacuara (35), por ejemplo. La experiencia que tienen, sumada a la juventud de algunos que vienen subiendo, lo hace un equipo compacto. En la Copa Libertadores, Libertad siempre hace excelentes partidos y se ha preparado para hacer un buen torneo.
Jugaste en los dos equipos, ¿con quién está el corazón?
La verdad es que yo estoy muy agradecido con la gente de Católica, con la hinchada, con los dirigentes, con todos los que me tocó estar, les tengo un cariño inmenso. En Libertad también tuve la suerte de estar un tiempo, así que ojalá que sea un gran partido y que gane el mejor. Realmente, tengo el corazón dividido.
En tu carrera como entrenador, ¿te gustaría darte una vuelta por Chile?
Claro que sí, en cualquier momento. Estoy empezando, tratando de hacer mis primeras armas, para que se vea el trabajo que estamos haciendo y algún día realmente me gustaría llegar a ser técnico de la Católica, con mucho gusto, para redituarle al club todo lo que me dio.
La última: este fin de semana juega la Católica contra la U, a la que supiste hacerle goles importantes…
Es un lindo compromiso y ahí sí quiero que gane la Católica, sin duda alguna, contra el clásico rival. Les deseo muchísimo éxito al cuerpo técnico y a los jugadores.
