El técnico Alfredo Arias arribó a la banca de Universidad de Chile en medio de una de las crisis deportivas e institucionales más trágicas de su historia. Dentro de una llegada cargada de polémicas, entre mentiras y comentarios misóginos, el uruguayo no ha tenido un momento de paz en el Centro Deportivo Azul y su escaso porcentaje de rendimiento, 13%, así lo refleja.
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Desde su debut en la banca laica ante Universidad de Concepción en el estadio Ester Roa, Arias sólo ha sumado dos puntos de 15 posibles y por eso los cuestionamientos a su trabajo comenzaron a sentirse este domingo en el Estadio Nacional. Apuntando directamente a sus cambios erróneos, cuando la U aún ganaba 3 a 2 a Curicó Unido, los hinchas azules pifiaron sin pudor cuando éste se retiraba de la cancha y el DT la sintió.
Luego de vivir varias discusiones con los asistentes del árbitro Julio Bascuñán, e incluso con trabajadores del Canal del Fútbol, Arias se vio molesto por el funcionamiento que presentaba su equipo en la cancha y también reclamaba que se estaban cometiendo muchas injusticias arbitrales en contra de la U.
Poniendo especial énfasis en los laterales-volantes Jean Beausejour y Matías Rodríguez, por no cerrar las líneas junto a los tres defensores universitarios, el DT tuvo acaloradas charlas con sus dirigidos y también gritó mucho a su improvisado volante de contención, Sergio Vittor, para marcar las espaldas de los mediocampistas visitantes.
Arias está lejos de poder concretar su anhelado sueño de tener un buen rendimiento en la escuadra universitaria y, por ahora, se empieza a ganar las críticas de un público que él pensaba, estaba de su lado, pero que con el correr de las semanas le da la espalda a otro DT de la U.
