Nicolás Jarry (81º del mundo) se está haciendo un nombre en el circuito de la ATP, porque otra vez sumó un triunfo ante un crack, porque ahora dejó en el camino al búlgaro Grigor Dimitrov (43º) y se metió en los cuartos de final de Barcelona.
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El chileno fue de menos a más en la arcilla del Conde de Godó, porque sudó para darle vuelta el partido al ex número 3º del planeta y celebrar con un ajustado 2-6, 6-4 y 7-6 (2), en dos horas y siete minutos de juego.
El partido arrancó con sorpresa, porque el Príncipe quebró de entrada el saque del europeo, empezando de la mejor forma posible. Sin embargo, Dimitrov se levantó de inmediato y se aprovechó que Jarry estaba sacando mal para romper su servicio en tres oportunidad, y apretar su puño a los 29 minutos, el tiempo que usó para ganar el set.
Jarry miró el suelo, se calmó en su silla y empezó de nuevo, como si el compromiso en la ciudad condal arrancara de cero. Con esa actitud saltó al polvo de ladrillo barcelonés, la cual le dio muy réditos, porque consiguió un break muy rápido y luego tuvo que mantener su servicio para emparejar las acciones.
Un punto importante a destacar es que en ésta manga el criollo le tomó la mano a su saque, subiendo a 77% de puntos ganados con su primer servicio, lo que a la postre resultó clave.
El set definitivo tuvo de todo, hasta lluvia, porque fue suspendido cuando iban 3-2, y volvieron a jugar tras una hora. Los dos tenistas mantuvieron sus juegos, hasta irse a un tie break, la «zona de Nicolás Jarry», donde se hizo fuerte nuevamente el nieto de Jaime Fillol, imponiéndose por 7-2.
Ahora el «perdedor afortunado» Jarry ya está instalado en cuartos de final, tras dejar en el camino a Marcel Granollers, Alexander Zverev y Grigor Dimitrov. Lo espera en la fase de los ocho mejores el ruso Daniil Medevedev (14º), quien superó al estadounidense Mackenzie McDonald (61º) por 6-3 y 6-2.
Así vivimos el partido de Jarry ante Dimitrov en Barcelona
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