El 1 de febrero del 2018 el presidente de Blanco y Negro, Aníbal Mosa, anunciaba felizmente la contratación de César Pinares, quien fue pedido expresamente por el entrenador de esa época de Colo Colo, Pablo Guede. El volante también era pretendido por Universidad de Chile, pero finalmente fichó en el cuadro que lo formó.
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El por entonces mandamás de la concesionaria irradiaba felicidad, ya que se quedaban con uno de los jugadores más codiciados por aquel mercado de fichajes. Pero…
Pinares llegaba al Cacique del Al Sharjah de los Emiratos Árabes Unidos, pero solo pudo lograr su salida tras un permiso especial que le dio la FIFA, ya que el jugador se «autodespidió» de ese club, puesto que tenía contrato hasta diciembre del 2018, pero al ver poca acción en el su equipo decidió volver a Chile.
Y un año después de la llegada del jugador, quien actualmente milita en Universidad Católica tras quedar libre ya que Colo Colo no le renovó el contrato por su bajo desempeño, ByN tendrá que asumir una millonaria demanda interpuesta por el elenco emiratí
Es que en la memoria de Blanco y Negro del 2018, en el tercer punto de «Otros Juicios», se encuentra como «Causa caratulada» la demanda de «el club Al Sharjah de Emiratos Árabes, en virtud de la contratación del jugador Cesar Pinares, demandó reconvencionalmente al club Colo-Colo por la suma de USD 7.535.000, ya que el jugador se había autodespedido de su club anterior».
Esto se da tras el escrito interpuesto por el propio Pinares contra el elenco árabe, tras no ser inscrito en el torneo local, por lo que logró obtener el pase del ente rector del fútbol mundial para fichar en otra liga.
El escrito agrega que «se contestó la demanda por parte de Colo Colo con fecha 31 de julio de 2018. Se solicitaron los últimos descargos al jugador, quién actúa como demandante en contra del club árabe con fecha 02 de noviembre de 2018«.
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Dicho recurso ya está presentado en el organismo con sede en Zurich y lo deberá enfrentar Mosa en su regreso a la presidencia de ByN. Aun así, la resolución puede demorar un buen tiempo y al interior del directorio están confiados en que FIFA fallará a su favor.
Mosa no lleva ni una semana de vuelta y ya «heredó» un gran problema.
