La nómina de los 23 seleccionados chilenos para la Copa América dejó como gran sorpresa al tercer arquero, Yerko Urra, que le ganó el puesto a Fernando de Paul, Laurence Vigouroux y a Claudio Bravo, quien tuvo chances de volver a la Roja para defender el título.
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Finalmente Urra, de 22 años, fue quien se quedó con el puesto gracias a sus buenas actuaciones en Huachipato y los entrenamientos en los microciclos con Reinaldo Rueda, las únicas nominaciones anteriores que tuvo el oriundo de Mulchén, aunque estuvo desde la primera nominación a los entrenamientos que instauró el actual cuerpo técnico que lidera el colombiano.
Formado en los acereros y con un frustrado préstamo a Santiago Wanderers, Urra tomó la camiseta de titular luego de la partida de Carlos Lampe a Boca Juniors para la final de Copa Libertadores 2018. El nuevo seleccionado nacional jugó en la victoria 3-0 ante Universidad Católica y desde ahí no soltó más la portería de la usina, pero ese no fue su debut.
El guardameta de 1,90 metros de altura debutó el 2016 con Miguel Ponce en la derrota como visitantes ante Audax Italiano por 3-0. Luego de eso, jugó algunos partidos del torneo local y en 2018 fue Nicolás Larcamón quien le dio la confianza para ser el portero en Copa Chile, donde sumó minutos para tomar la posta del seleccionado boliviano, quien según reconoció el mismo Urra le dijo que «trabajara para llegar a la selección«.
De esta forma, Urra usará el cupo que supuestamente estaba reservado para Bravo, con quien le hubiese gustado entrenar según reconoció en entrevistas a medios regionales, mientras se comienza a consolidar como el nuevo arquero de la selección chilena.