Cuando Edson Puch se convirtió en jugador de Universidad Católica a comienzos de la temporada 2019, el propio futbolista y el Grupo Pachuca (dueño de su pase) tenían una proyección común: un buen desempeño en la UC podría brindarle a Comando la opción ser parte del plantel de la Roja en la Copa América de Brasil.
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Aquella proyección parecía que tenía todo para materializarse, ya que Puch consiguió sobresalir en la Franja y así pudo entrar en el radar de Reinaldo Rueda, quien lo convocó a uno de sus microciclos en la Selección. Pero finalmente el iquiqueño no pudo ingresar en la lista definitiva de Chile para la nueva edición del certamen continental.
El desgarro que sufrió jugando por Católica en la bochornosa derrota por 5-0 ante Independiente del Valle en Quito lo dejó fuera de la nómina de 23 jugadores de la Roja, echando por tierra el anhelo del jugador, pero también el deseo de sus propietarios. El Grupo Pachuca proyectaba ver a Puch en Brasil 2019, ya que ello implicaba una vitrina inmejorable para conseguir ofertas por su carta.
Cabe recordar que Puch firmó un préstamo con la UC hasta diciembre del 2019, sin embargo, el contrato contiene una cláusula que permite que el jugador se marche a mitad de año, en el caso de que se presente una buena oferta. La apuesta del Pachuca es lograr una venta del pase del iquiqueño, por quien invirtieron cerca de cuatro millones de dólares cuando se lo compraron al Necaxa.
Pero sin la vitrina de la Copa América y con una lesión que lo tendrá, al menos, por las próximas tres semanas fuera de las canchas, el panorama se dificulta para los mexicanos. Y si bien han contado con diversas consultas por Puch (el Santos Laguna es uno de los equipos que ha manifestado interés), de momento no hay ninguna oferta concreta sobre la mesa.
Un nuevo panorama
Mientras tanto, en Cruzados analizan diversas fórmulas para seguir contando con los servicios de Puch. Una alternativa es hacer uso de la opción de compra pactada en el contrato de préstamo, es decir, pagar una cifra cercana a los 1.8 millones de dólares para quedarse con el pase del jugador. Aquella opción vence el 31 de mayo y, de momento, en San Carlos de Apoquindo ven poco probable optar por esa vía, más aún después de la eliminación en la Libertadores y el duro panorama que enfrentan en la Sudamericana.
Sin los dineros de las copas internacionales para el segundo semestre, la UC tendrá que resolver el armado de su plantel con el cinturón mucho más ajustado y por ello se ve poco factible que haga una fuerte inversión por Puch. Sin embargo, la lesión del jugador y su consecuente ausencia de la Copa América le presentan un nuevo escenario a la UC. Con menor vitrina durante el receso de mitad de año, podría darse un escenario en el que el Pachuca no reciba ninguna oferta concreta por el iquiqueño.
En dicho caso, se tendría que respetar el contrato de préstamo que está vigente con la UC y que contempla que el jugador permanezca en San Carlos de Apoquindo hasta diciembre. Mientras tanto, el propio Puch deja en claro su deseo. «A mí me gustaría quedarme y poder salir campeón acá», declaró en radio Cooperativa, aunque en esa misma entrevista sostuvo que «yo puedo decir ‘me quiero quedar’, pero ante ello Pachuca puede decir ‘que paguen’, entonces también depende mucho de los clubes».
