La serie de polémicas en la selección chilena, con recados por la prensa, tuvo un capítulo bisagra, ya que por primera vez uno de los referentes de la Roja habló directamente sobre el quiebre del camarín. Y quién otro que el nuevo capitán, Gary Medel.
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El formado en Universidad Católica asumió su rol de líder y ofreció una conferencia de prensa, donde asumió que «el problema está, es evidente el quiebre con Claudio (Bravo) al interior del camarín por todo lo que ha pasado. Tiene que venir para hablar y solucionar el problema, pero en el camarín». Cabe recordar que hace unos días, Medel le respondió a un hincha por las redes sociales que no existía ningún inconveniente en la Roja, sino que todo lo había armado la prensa.
Desde que llegó Reinaldo Rueda, se ha especulado con una pelea entre Arturo Vidal y Claudio Bravo, la que tendría a este último, junto a Marcelo Díaz, fuera de las nóminas. Todo esto alimentado por publicaciones en redes sociales del volante del Barcelona donde ha escrito «nunca sapo» y conversaciones del portero del Manchester City con periodistas acusando indisciplinas en el plantel.
Por lo mismo, los dichos de Medel marcan el inicio de un nuevo capítulo, ya que ahora la Selección pretende enfocarse de lleno en la próxima Copa América y, por eso, el nacido en Conchalí prefirió encarar directamente el problema. El líder de la Roja había manifestado en septiembre pasado que «llevar la jineta de capitán es una responsabilidad muy grande, hay que hacerlo bien. Claudio lo hizo bien en todos estos años que ha estado en la Selección», por lo que ahora está asumiendo ese deber.
Vidal, por su parte, hace algunos días había indicado que «la interna está muy tranquila, el ambiente afuera es muy distinto». A su vez, Rueda, después de presentar la nómina, comentó que «todo el equipo necesita esa armonía y sinergia de una sana convivencia».
De esta forma, Gary Medel por fin se puso la jineta de capitán y salió a aclarar los rumores. Los problemas con Bravo existen, pero se deben arreglar dentro del camarín, por lo que ahora la Roja de Rueda puede enfocarse en su gran objetivo: Brasil 2019.
