Desde que se conocieron los grupos del Mundial femenino de Francia 2019 los cálculos indicaban que Chile debía hacer buenos partidos ante Suecia y Estados Unidos, dos potencias del fútbol femenino, mientras que el rival a vencer era Tailandia, para así optar a clasificar como mejor tercero.
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Ya jugadas las dos primeras fechas se cumplió la primera parte de la premisa y ahora depende de la Roja femenina ganar a las asiáticas, pero además necesita de buenos resultados en los otros grupos. Uno que no ayudó fue el empate 0-0 entre España y China, de este lunes.
Europeas y asiáticas no se hicieron daño, quedando las dos selecciones con cuatro puntos, con las hispanas en el segundo lugar gracias a una diferencia de gol de 1 a favor, mientras que las chinas quedaron con cero y ambas clasificaron a octavos de final.
De esta forma, sólo quedan tres cupos en disputa para cinco posibles selecciones. Aún así las dirigidas por José Letelier deben apostar a que Argentina y Escocia, al igual que Camerún y Nueva Zelanda, empaten, para seguir soñando con estar entre las 16 mejores del mundo.
Por su parte, Alemania goleó a Sudáfrica 4-0 y se quedó con el grupo B con canasta limpia, 9 puntos y ningún gol en contra, ratificando su condición como candidatas al título, luego de un inicio con algunas dudas.