«Nadie de la prensa creyó en nosotros, de la prensa chilena. Todo esto es mérito del profesor Reinaldo Rueda«, dijo el capitán de la Selección chilena Gary Medel, una vez que la Roja eliminaba a Colombia por lanzamientos penales y se metía el viernes pasado a su tercera semifinal seguida de Copa América. Lo que para muchos parecía imposible antes del certamen, volvía a ocurrir.
PUBLICIDAD
Es que la Generación Dorada de la Roja, esa que nos llevó a dos Mundiales, que ganó dos Copa América y que estuvo a punto de conquistar la Copa Confederaciones, demostró que pese a las dudas aún está viva y tiene mucho por conseguir.
La sensación antes del certamen era que el final de este grupo de jugadores en Brasil 2019, pero ellos se encargaron de tapar bocas a todos los que cuestionamos su calidad y el futuro de ellos en la escuadra nacional. «Esta generación tiene hambre, los jóvenes están entrenando muy fuerte y están aprendiendo de nosotros«, explicó Arturo Vidal tras dejar en el camino a Colombia.
Y eso se trasladó a Reinaldo Rueda, quien llegaba muy complicado al torneo y mucho se hablaba de que un mal resultado iba a cortar su proceso. Pero el colombiano respondió con creces y en silencio, en su estilo calmo y muy centrado, trabajó y trabajó hasta encontrar la paz en este certamen. «Él es un señor del fútbol. Sabe mucho, por algo ha ganado tanto. Nosotros estamos desde un primer momento con él y seguiremos así hasta que el proceso acabe, fueron muy injustos los que lo criticaron, venimos haciendo un buen trabajo de un año», decía Medel sobre Rueda.
Por su parte, Vidal también lo destacó: «Hemos pasado un año y medio trabajando duro, y sabíamos que en esta copa iba a salir el mejor Chile, desde que llegó el profesor Rueda todos los entrenamientos nos entregamos por entero«.
Los que llegaban con dudas en la Roja
Por su parte, varios nombres que arribaban a la Copa América con muchas dudas en su rendimiento han demostrado que cuando se ponen la camiseta nacional se transforman.
Es el caso de Jean Beausejour, Charles Aránguiz, Eduardo Vargas y Alexis Sánchez. Bose venía sin ritmo y lejos de su mejor nivel en la U, pero en este torneo volvió a ser el eficiente futbolista que conocimos. El Príncipe es, sin duda, el mejor jugador chileno en este campeonato con su regularidad tipo relojito que lo hace un hombre fundamental para el funcionamiento del equipo.
PUBLICIDAD
Párrafo aparte para Vargas y Sánchez. Turboman entró casi por la ventana a la nómina de 23 jugadores y ante Japón se destapó con dos goles para seguir estirando su idilio con la Roja. En tanto, Alexis ha sido el gran futbolista de la historia de la Selección en esta Copa América, lejos del desastre de la última temporada en Manchester United, el tocopillano demostró que cuando está vestido de rojo con el escudo de la escuadra nacional es otro jugador y saca a relucir sus mejores atributos. Junto a Aránguiz es el mejor del equipo en este torneo.
Para cerrar, las tres apuestas de Rueda han rendido exámenes con creces: Gabriel Arias, Guillermo Maripán y Erick Pulgar. El arquero, que fue víctima casi de bullying virtual por parte de los hinchas tras su partido ante Ecuador, han mostrado carácter para aguantar los malos momentos y soportar la mochila pesada que es suplir a Claudio Bravo. Mientras que Maripán y Pulgar se han graduado de figuras, el zaguero ha sido muy eficiente en sus intervenciones y crece partido a partido, mientras que el volante está demostrando su enorme evolución en Italia y ha mostrado su calidad en todas las facetas del juego.
La Roja tapó bocas y amenaza con más en esta Copa América.