Si Joaquín Niemann no hubiese hecho ese doble – bogey en el hoyo 17 de la primera ronda en el 3M Open, tal vez, la historia sería diferente. Para bien o peor, ese pequeño tropiezo lo hizo despertar. Y es que sí, cuando el chileno se enfoca y activa su deseo de ir adelante, llega a ser un fenómeno.
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Hoy sábado, en el moving day, Niemann firmó otro vueltón de 65 golpes (-6) para ocupar una plaza en el Top 10 -quedó noveno- con 12 bajo par, a tres impactos de los punteros.
Además, el nacional nunca en su carrera, tanto como amateur y profesional, había hecho dos rondas seguidas de 63 y 65, refiriéndonos por supuesto a competencias oficiales.
Ese es el momento de Niemann, que en su tercera ronda apuntó todos los greens (18 en total). Y, además, en todos se dejó putts cercanos al hoyo, unos más lejos y otros más cerca. Incluso, si algunos caían (por cierto, los putteó muy bien), ese 65 pudo haber terminado en 62 fácilmente.
El chileno en total putteó diez veces para birdie entre los dos y tres metros. Embocó seis. Mientras que tuvo otras también de los cuatro metros, demostrando que su rendimiento en general, y sobre todo en los tiro a green, es abismal.
Este domingo, Niemann tendrá la posibilidad de ganar su primer título en el PGA Tour y no es poco.
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