La U llegó a acuerdo con la joya uruguaya Leonardo Fernández y le cerró las puertas a Jonathan Zacaría

Azul Azul aseguró la llegada del volante uruguayo Leonardo Fernández para convertirse en el último refuerzo de Universidad de Chile en la temporada 2019. Considerando el complejo momento deportivo que vive la institución, en la concesionaria buscaron un jugador con características creativas, buscando generar mejor oportunidades de cara al arco rival.

A pesar de que tuvieron diversas alternativas para el puesto, finalmente confiaron en una de las máximas promesas del fútbol charrúa para convertirse en el tercer fichaje de la U, buscando que se transforme en el conductor de un equipo que no ha presentado muchas ideas futbolística y que aún sigue en riesgo de descenso a segunda división el próximo año.

El mediocampista de 20 años llega a los azules con un préstamo por un año desde el Tigres de México -club que compró su pase con un contrato por cinco temporadas al Fénix de Uruguay-, y con la idea de tomar ritmo de competencia para luego volver al fútbol azteca y ponerse a las órdenes de Ricardo Ferreti.

Dentro de círculo cercano lo destacan como «un 10 armador y de muy buena pegada, especialista en tiros libres«, un expediente que está en deuda para los azules dentro de la actual temporada y que podría sumar un nuevo elemento para el equipo del técnico Hernán Caputto.

Zacaría se queda fuera

Ante la llegada de Fernández, el volante argentino Jonathan Zacaría quedó sin opciones de ser inscrito dentro del plantel universitario, considerando que el uruguayo sería el quinto refuerzo reglamentario que tendrá la U para el segundo semestre de este año.

Aunque el ex Quilmes y Palestino estaba entrenando normal, y fue destacado por Caputto y sus propios compañeros por su compromiso en las prácticas, finalmente la dirigencia de Azul Azul decidió no arriesgarse por un jugador que no tiene actividad hace dos años. Bajo esa perspectiva, Zacaría quedará ligado al club hasta que termine su contrato con la U en diciembre de este año y luego quedará en libertad de acción.

La U se termina de armar para buscar evitar el descenso a segunda división del próximo año. Su más cercano desafío será este domingo 18 de julio (12:30 horas), frente a Unión La Calera y en el estadio Nicolás Chahuán.