El delantero de Universidad de Chile, Nicolás Guerra, analizó el complejo presente que vive su escuadra en el Campeonato Nacional 2019. Dada la lucha por el descenso que tienen los universitarios semana a semana, el canterano azul manifestó que cada duelo lo disputan como una final, pero que tras la victoria a Deportes Antofagasta, el positivismo logró volver al camarín.
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«Era necesario ganar, más contra un equipo como Antofagasta, con quien peleamos abajo. Fue un partido que necesitábamos ganar y eso nos dio un aire positivo en el camarín. Nos preocupamos de nosotros y de querer sacar los puntos porque los necesitamos. Cada semana la vivimos como una final. Con la llegada del nuevo ‘profe’, tratamos de recibir toda la ayuda para remar todos al mismo lado», aseguró Guerra en el sitio oficial de la U.
«La concentración hasta el minuto final fue la clave, nos mantuvimos compactos, hubo organización, nadie se salió del plan del partido, corrimos todos por el compañero y marcamos la diferencia», agregó.
Por otra parte, el atacante se refirió a su actuación en el equipo manifestando que «el delantero siempre tiene que evaluarse en dos facetas: el juego y el gol. Tuve un par de chances y no las convertí. Estuvimos erráticos. En el juego siento que influí harto, cooperé, me moví mucho, apoyé y corrí la mayoría de las pelotas. Me sentí bien y conforme con mi rendimiento, pero con cosas que mejorar».
La U entrena esta semana pensando en el duelo de este domingo 18 de julio (12:30 horas) frente a Unión La Calera, en el estadio Nicolás Chahuán y en una nueva instancia decisiva del equipo de Hernán Caputto para salir de la zona de descenso.
