La buena campaña de Chile en el Sudamericano de voleibol ya tiene a la Roja en semifinales, con opciones de quedarse con el primer lugar de su grupo y clasificados al preolimpico de enero del próximo año, pero con un gran ausente: Simón Guerra, jugador que después del campeonato se sumará a las filas del club alemán Netzhoppers.
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El central nacional oriundo de Tongoy, y que fue clave en el cuarto lugar de los Juegos Panamericanos de Lima, no ha disputado ningún minuto del torneo debido a un desgarro en el recto abdominal que tiene desde hace dos semanas y le ha tocado ver las victorias 3-0 ante Perú y Bolivia desde la banca.
«Es de 7 milímetros, es chico, pero en una zona que uno usa para todo. Recién hoy pude volver a entrenar, con un par de ataques, además de bloqueos que vengo haciendo desde hace un par de días. Pero estoy contento, viviendo el partido de una manera distinta, porque hace tiempo que no vivía un partido desde la banca«, cuenta Guerra en conversación con El Gráfico Chile.
¿Te vas a cuidar o llegas a semifinales?
Se llega como sea. Hoy le dije a Chichón (Daniel Najamkin, entrenador del equipo) que si él quería yo entraba. Estoy ahora lleno de parches, como estaba Gary Medel en el Mundial de fútbol jajaja. Bueno, pero estoy dispuesto, ya hablamos, me queda lo último, el desgarro va en 3 milímetros solamente, así que tendré que jugar bien protegido.
¿Cómo lo has vivido desde la banca? Considerando que ya están entre los cuatro mejores
Sí, ya estamos, aunque igual queremos ganarle a Venezuela que es nuestro rival directo. Fueron dos partidos muy buenos, sobre todo con Perú, y estoy muy contento porque todos estos triunfos, lo que estamos viviendo ahora, sirve como un cierre de un gran año que para nosotros ha sido provechoso, además de agradecerle a toda la gente que nos acompaña.
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¿Te ilusiona jugar la final?
Totalmente, es el objetivo que nos planteamos. Sabemos que es ambicioso, que Brasil y Argentina son muy fuertes, aunque hayan venido con equipos mezclados entre el A y el B, pero confiamos en lo que hacemos, en nuestro juego y en toda la experiencia que hemos logrado. Llevamos mucho tiempo jugando juntos y estamos esperanzados en llegar a la final.