Una de las grandes interrogantes que tuvo durante la semana el entrenador de Colo Colo, Mario Salas, para el duelo ante Audax Italiano era dar con el reemplazante del capitán y goleador Esteban Paredes, quien fue reservado para el Superclásico 186 ante Universidad de Chile, que se jugará el sábado desde las 15:00 horas en el estadio Monumental.
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En esa lucha por el puesto de centrodelantero estaban Javier Parraguez e Iván Morales, ya que Andrés Vilches perdió terreno y la confianza de Salas en las últimas semanas, y de hecho ni siquiera fue citado para el compromiso en el Bicentenario de La Florida.
Finalmente, el Comandante se decidió por el ex atacante de Huachipato, quien cada vez que fue requerido en los partidos del Campeonato Nacional no convencía y fallaba goles de manera increíble. Ante los itálicos parecía que la historia se repetía.
En la primera parte, Parragol no definió bien las ocasiones que se había creado y en el segundo tiempo tuvo un fallo increíble. Recibió un centro sin marca dentro del área y solo tenía que conectar bajo el arco de Joaquín Muñoz para anotar, pero erró de manera clamorosa, ganándose el desapruebo de los hinchas albos.
Pese a ello, el ex Puerto Montt y Santiago Wanderers se sacó la mufa minutos después y a los 83′ marcó el 4-2 final con un impecable cabezazo en el corazón del área, provocando la euforia de los fanáticos del Cacique.
Parraguez celebró con euforia el gol y la banca del Cacique fue la primera en ir abrazarlo, es que el delantero necesitaba recuperar la confianza, sobre todo tras la ocasión que había fallado minutos antes y por eso todos sus compañeros lo fueron a apoyar.
En el juego, le costó mucho asociarse y ser el desahogo que necesitaba el equipo para pivotear en ataque, siendo reemplazado a los 90′ luego de un gran desgaste y ratificó la confianza que le brindó Salas al elegirlo como el reemplazante del histórico Paredes.