A sus 16 años, la irrupción del jóven delantero del Barcelona, Ansu Fati ya es inminente. Su convocatoria a la selección sub 21 de su país, Guinea-Bisáu, es la última evidencia de ello.
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Ayudado quizá de forma accidental y prematura con las lesiones de Messi, Suárez y Dembéle, Ansu ya está en la élite del fútbol y para quedarse.
Según consigna el medio español Mundo Deportivo, Ernesto Valverde, entrenador del cuadro azulgrana y Éric Abidal, director deportivo, creen irreversible que Fati vuelva al Barcelona B o a la Juvenil A.
Es por eso, que el cuadro español, ya comienza el análisis de una estrategia para blindarlo: una cláusula de rescisión de 100 millones de euros.
En ese sentido, el contrato del compañero de Arturo Vidal, que fue renovado el pasado 17 de julio, por 3 años hasta 2022, ya establecía una ficha de partida si era jugador del equipo B y otra si era del primer equipo.
Sin embargo, si sigue en el mismo nivel, Barcelona piensa en valorarlo a nivel de un jugador con sueldo de primer equipo con posibles aumentos; además de tener la intención de aumentar su cláusula a 200 millones, al igual que Juan Miranda y Oriol Busquets, canteranos del club.
En lo deportivo, el próximo desafío para el cuadro culé, será ante el Eibar de Fabián Orellana por la novena fecha de La liga española, el sábado 19 de octubre a las 08:00 horas.
