Las manifestaciones sociales que se están llevando a cabo en nuestro país han puesto un manto de dudas sobre la realización de la final de la Copa Libertadores en Santiago. La definición entre River Plate y Flamengo está programada para el 23 de noviembre en el Estadio Nacional y la Conmebol la ratificó mediante una misiva publicada en su sitio web el domingo pasado.
PUBLICIDAD
Sin embargo, en Argentina ponen en duda que el partido se lleve a cabo en el recinto ñuñoíno. La prensa transandina asegura que el organismo rector del fútbol continental ya tiene una alternativa en el caso de que sigan las protestas en Chile, que sería Asunción.
No obstante, en otra ciudad paraguaya, Luque, donde está la sede del ente sudamericano, no se dan por enterados de esta supuesta opción de contingencia. “Qué raro, acá nadie habla de un plan B”, comentan desde suelo guaraní a El Gráfico Chile.
Si bien desde tierras paraguayas asumen que están siguiendo de cerca lo que ocurre en nuestra capital, la postura no se ha modificado desde la última información oficial. “Nosotros emitimos un comunicado y no ha cambiado nada respecto a eso. La intención es jugar en el lugar, en el día y en el horario establecidos”, complementan.