Los futbolistas del Napoli se rebelaron el pasado martes, tras su partido por Champions League y se negaron a sumarse a la concentración que había dispuesto la directiva del club italiano, una vez que terminara el duelo frente al Salzburgo.
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Los dirigidos por Carlo Ancelotti igualaron 1 a 1 en el encuentro frente a los austríacos y luego de eso estaba dispuesto que se fueran desde el Estadio San Paoli rumbo a su hotel de concentración. Pese a eso, y luego de que sólo su capitán Lorenzo Insigne hablara con la prensa, el resto del plantel se fue sin dar declaraciones en el recinto, omitieron el bus dispuesto por el club y tomaron sus autos para regresar a sus casas.
Los únicos que regresaron al centro deportivo Castel Volturno fue el cuerpo técnico de Ancelotti, con el entrenador incluido, quien tampoco habló con los medios de comunicación en conferencia de prensa y arriesga una multa económica. Una decisión que tomó por estar en contra de la medida impuesta por el presidente y máximo accionista del club, Aurelio de Laurentiis, de concentrar tras el compromiso.
Los jugadores volvieron a entrenar la mañana de este miércoles y luego también dejaron el centro deportivo napolitano para volver a sus hogares. Tras eso, Napoli informó en un comunicado: «El club comunica que, con referencia a los comportamientos de sus futbolistas en la noche del martes 5 de noviembre de 2019, procederá a tutelar sus derechos económicos, patrimoniales, de imagen y disciplinarios en las sedes oportunas. Se precisa que ha sido confiada la responsabilidad sobre la realización de jornadas de concentración por parte del primer equipo al entrenador Carlo Ancelotti. Además comunica que se ha determinado no realizar declaraciones a los medios hasta una fecha a concretar«.
