«En estos escenarios no todos ganan, nadie sale triunfador de esto, todos están cediendo algo para que podamos tener algo mejor», reflexiona el presidente del Sifup, Gamadiel García, sobre el complejo escenario que atraviesa el fútbol chileno en medio del estallido social y las fórmulas que se manejan para dar por cerrada la temporada 2019.
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La posición de los futbolistas es no retomar la actividad en lo que resta de año y, para ello, como gremio, en la última asamblea del Sifup, decidieron asumir un sacrificio: si en el Consejo de Presidentes de la ANFP se opta por poner fin a los torneos profesionales, un grupo importante de jugadores sufrirá un perjuicio en términos salariales.
En dicho escenario, la mayoría de aquellos jugadores cuyos contratos culminan al término de la temporada 2019 se quedaría sin sus salarios de diciembre, siguiendo lo establecido en el artículo 152 bis D del Código del Trabajo, el que regula los vínculos contractuales de los deportistas profesionales en Chile.
«El contrato de trabajo de los deportistas profesionales y trabajadores que desempeñen actividades conexas se celebrará por tiempo determinado. La duración del primer contrato de trabajo que se celebre con una entidad deportiva no podrá ser inferior a una temporada, o lo que reste de ésta, si se ha iniciado, ni superior a cinco años», establece el citado artículo sobre la extensión de los vínculos.
En el marco de dicha regulación, la mayor parte de los contratos de los futbolistas en Chile se extiende hasta el término de una temporada (último partido oficial del equipo correspondiente) y, en menor cantidad, con una fecha específica como límite (ejemplo: 31 de diciembre).
Por lo dicho, si este viernes el Consejo de Presidentes aprueba la moción para dar por cerrado el año futbolístico, los jugadores cuyos contratos finalizan «al término de la temporada 2019» no recibirán salarios en diciembre, ya que el 29 de noviembre será la fecha del cierre de la campaña.
«La mayor parte de los jugadores tiene ese contrato, hay muy pocos que tienen a plazo fijo, por lo tanto, ahí hay un tema que lo deben manejar las instituciones y, por supuesto, nosotros con nuestros abogados para ver sus finiquitos en el caso de que efectivamente se dé por terminada la temporada», asume al respecto Gamadiel, quien enfatiza que «los jugadores están dispuestos, como deberían estar todos en este tipo de situaciones, a perder algo».