Ya están trazados los objetivos de Universidad Católica para el mercado de fichajes rumbo a la temporada 2020. El actual monarca del fútbol chileno ya hizo sus definiciones respecto a la conformación de su plantel para el próximo año y lo que viene ahora son las negociaciones correspondientes.
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Frente a los casos de término de contrato, Duvier Riascos es el único confirmado como baja. Con Stefano Magnasco y César Fuentes ya hay avanzadas conversaciones para renovar, mientras que con Juan Cornejo y Edson Puch se debe negociar con el Grupo Pachuca. En tanto, Jeisson Vargas y Sebastián Sáez quedaron en veremos.
Lo de Sacha pasa por los cupos de extranjeros y los puestos a reforzar que ya definieron entre José María Buljubasich y Gustavo Quinteros. El gerente deportivo y el director técnico determinaron que es prioridad el fichaje de un centrodelantero y un mediocampista interior que pueda competir con César Pinares y Luciano Aued.
La UC ocupará sí o sí el cupo de extranjero que se liberó con la salida de Duvier Riascos en la contratación de un nuevo atacante. Uno de los apuntados es del argentino de 30 años Diego Churín, quien tiene contrato hasta mediados de 2021 con Cerro Porteño, pero que podría salir del club paraguayo en el ciclo de fichajes de este verano.
Para el mediocampo uno de los nombres que manejan en San Carlos de Apoquindo es Juan Leiva, de 26 años, y quien tuvo una destacada temporada en Unión La Calera jugando como interior. Eso sí, por ahora es alternativa y para reforzar esa zona del campo la UC también podría ocupar otra plaza de extranjero.
Si Cruzados determina ocupar un cupo de extranjero para reforzar el mediocampo (además del que sí o sí se destinará para el atacante), el afectado justamente sería Sebastián Sáez, ya que los dos nuevos foráneos en el plantel se sumarían a Matías Dituro, Luciano Aued y Diego Buonanotte como los 5 extranjeros del equipo.