El plantel de Colo Colo 2020 ya tiene bastante avanzada su conformación gracias al trabajo de Marcelo Espina. Y no es menor lo que ha logrado el director deportivo de los albos, ya que cerró cuatro refuerzos antes del inicio de la pretemporada y sin gastar un peso.
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Del presupuesto de US$3 millones que tiene Blanco y Negro para reforzar el equipo de cara a la próxima temporada, no se tocó nada para las llegadas de Miguel Pinto, César Fuentes, Leonardo Valencia y Matías Fernández. No sólo eso, hasta el momento ha cumplido con las exigencias del cuerpo técnico, como con la llegada del portero, además de las de los hinchas, con el retorno de un ídolo del club como Matigol.
Sin embargo, ahora viene la gran prueba de fuego para el Calamar. Es que sin haber gastado aún, pareciera que el Cacique apostará todo para la llegada de un delantero centro que pueda reemplazar a Esteban Paredes, quien renovó para la próxima temporada, pero que no jugará todos los partidos e irá dosificando entre la Copa Libertadores y el Campeonato Nacional, debido a sus 39 años, que lo tienen como el jugador más longevo de la Primera División.
El predilecto de Mario Salas para esa posición es Nicolás Blandi. El ariete de San Lorenzo ha sonado con fuerza, pero desde Argentina aseguran que el alto precio del jugador lo aleja del estadio Monumental, además de que está en los planes del Ciclón, lo que estaría complicando las negociaciones.
Por lo tanto, se buscan un plan B, donde hasta Fernando Zampedri fue sondeado, pero ahí Universidad Católica tiene conversaciones bastante avanzadas. El que ha sido seguido y estaría al alcance es Lucas Viatri, ex Peñarol que anunció su salida del cuadro uruguayo, pero que podría volver con la llegada de Diego Forlán como entrenador del Carbonero.
Con todo ese escenario, los albos no descartan buscar goles dentro de Chile. De hecho, Tobías Figueroa está a la espera de que se decidan en Macul. Al delantero le interesa dar el salto a un grande como el Cacique y quiere aportar en su condición de segundo goleador del último Campeonato Nacional, con 11 tantos.
El único que dentro del país le podría cortar las opciones al ariete de Antofagasta es el máximo goleador del último torneo con 14 tantos, Lucas Passerini. Eso sí, el delantero tiene una cláusula de salida de US$3 millones por la totalidad del pase, pero el 50% por US$1.5 millones podría bastar para sacarlo de La Cisterna. Desde el entorno del jugador esperarán hasta el 15 de enero por una propuesta. Si ésta no llega, seguirá en el cuadro árabe para jugar la Libertadores.
Colo Colo quiere traer goles desde afuera, lo que dejaría relegados a Javier Parraguez e Iván Morales, el joven proyecto del club a quien Salas lo tiene contado como puntero, pero que ya declaró que sabe «que me tocará competir, a mí nunca me ha tocado fácil«.