Barcelona tenía la obligación de ganar al Espanyol, no solo porque es el clásico de Cataluña, sino porque Real Madrid había hecho lo propio con Getafe y los alcanzó en el liderato de La Liga de España. Pero los culés solo pudieron empatar 2-2.
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De hecho, los dirigidos por Ernesto Valverde tuvieron que remar desde atrás, ya que a los 23 minutos David López había abierto la cuenta para los locales, desatando la sorpresa en el Corneprat.
En el segundo tiempo, a los 50′, ingresó Arturo Vidal y junto a Luis Suárez levantaron al equipo para iniciar la remontada culé. Primero fue el uruguayo quien apareció sin marca dentro del área para anotar el empate transitorio, luego que el chileno arrastrara a los defensas hacia el centro.
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Solo 7 minutos después Suárez le devolvió la mano al volante y, tras un gran centro de borde externo, Vidal pudo rematar de cabeza y poner en ventaja a su equipo, al mismo con el que venía peleado las últimas semanas luego de una fallida demanda por no pago de premios.
Pero a los 75′ los azulgrana comenzaron a desmoronarse, luego de la expulsión del holandés Frank De Jong, lo que le podría abrir una puerta a la titularidad al oriundo de San Joaquín en la próxima fecha.
A quienes les abrió la puerta fue a los periquitos, quienes aprovecharon los espacios que dejaban los visitantes con la velocidad del chino Wu Lei, quien a los 88′ con un preciso contragolpe anotó el empate definitivo.
De esta forma, Barcelona alcanzó los 40 puntos y quedó igualado en la cima de la tabla con el Madrid en la estrecha pelea por un nuevo título de liga, mientras que Espanyol se mantiene en el último lugar con solo 11 unidades.