El ePrix de Santiago de Fórmula E dejará imborrables imágenes en su tercer paso por la capital. El toque del BMW i Andretti del alemán Maximilian Günther y del DS Techeetah del portugués António Félix da Costa, así como el sobrepaso del germano en la última parte de la carrera marcaron el desarrollo de la misma.
PUBLICIDAD
Pese a que perdió el primer lugar a poco del final, puesto que recuperó antes de la bandera a cuadros, Günther siempre tuvo esperanzas de ganar la carrera. «Me mantuve controlando la temperatura en el auto, vi que Da Costa tenía algunos problemas en la pista y antes de la curva 9 me la jugué, pensé ‘es ahora o nunca’ y ataqué. Estoy muy feliz con la victoria«, señaló.
Günther logró en el Parque O’Higgins el primer triunfo de su carrera en Fórmula E en 13 fechas disputadas y se convirtió, con 21 años, ser el piloto más joven en lograrlo. «Suena bien (risas). Es importante, es una buena estadística para mí, pero es más importante los 25 puntos que entrego al equipo, así como ganar la carrera y llevarme este trofeo«, comentó el alemán.
Da Costa, a su vez, quedó conforme con el segundo puesto, pese al sobrepaso final. «Quedan sensaciones positivas. Salir décimo y terminar segundo siempre es bueno, pero claro, cuando estás primero y abriendo la última vuelta para después dejar ir la carrera a tres curvas del final es doloroso. No hicimos un trabajo perfecto en el equipo porque no calculamos bien la temperatura por medio grado y eso nos costó la victoria«, indicó el portugués.
El podio de la carrera lo completó el neozelandés Mitch Evans (Jaguar), que largó desde la pole y que encabezó la carrera durante la primera mitad. «Fue una carrera dura, el clima de Santiago fue muy caluroso en algunas partes de la pista lo que afectó a nuestros autos. Por eso tuvimos que conformarnos con el tercer puesto. Ahora, a trabajar al equipo para mejorar«, declaró.
