El nuevo refuerzo del Manchester United, Odion Ighalo, llegó al club a comienzos de febrero, tras un préstamo conseguido por los Diablos Rojos desde el Shanghai Shenhua de la Superliga de China. Pese a eso, el nigeriano no ha podido entrenar normalmente en Old Trafford, debido a la preocupación que existe en su escuadra por el coronavirus.
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Dado el apogeo que existe de la epidemia en China, dado que su origen se dio en la ciudad de Wuhan, en el equipo inglés estaban preocupados por la posibilidad del brote del virus o contagio al resto de los compañeros y funcionarios del United, por lo que le pidieron a Ighalo entrenar de forma separado al resto del plantel, en el Centro Nacional de Taekwondo, según afirma el medio británico Metro.
Aunque en la prensa de ese país y en el club de Manchester creen que la opción de que Ighalo esté contagiado de esa enfermedad son «remotas», no podrá acercarse al centro de entrenamiento del equipo hasta que no terminen con los estudios determinados que descarten el coronavirus.