En abril del 2012, Nicolás Massú jugó su última serie de Copa Davis. En realidad, no «jugó», pero sí integró el equipo chileno que fue hasta Uruguay para vencer a los «Charrúas» por 3-1, en una escuadra que completaban Paul Capdeville, Guillermo Hormazábal y Jorge Aguilar.
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Desde entonces, nuestro país disputó 18 cruces por la «Ensaladera de Plata» y en todos ellos estuvo o Cristian Garin o Nicolás Jarry, quienes llevaron al cuadro criollo de vuelta al Grupo Mundial. Este viernes y sábado, en la visita a Suecia, no estará ninguno de los dos.
El «Tanque» está lesionado en la espalda y se bajó tras su retiro del ATP de Santiago, mientras que el «Príncipe» está suspendido por dopaje. El «Vampiro» tendrá que arreglárselas con Alejandro Tabilo, Marcelo Barrios, Bastián Malla y Matías Soto.
La experiencia del conjunto nacional en el certamen copero es prácticamente nula, ya que el nacido en Canadá apenas ha jugado un partido por el torneo de países, uno de dobles, justamente junto a «Warrior», cuando cayeron en las Finales de Madrid ante la dupla alemana. Este último tiene algo más de trayectoria, con otro duelo de parejas, también con derrota, y uno de singles, con victoria sobre el dominicano José Olivares en el cuarto punto del triunfo por 5-0 en Santo Domingo, en el 2017.
«Tienen el nivel para sorprender»
El otro partido de parejas que jugó Barrios fue en compañía de Hans Podlipnik, cuando cayeron en Austria a inicios del año pasado. También será la primera serie sin «H-Pod», quien igualmente fue parte importante en el regreso del equipo criollo a la élite.
Pese a las bajas, el «Polaco» confía en la joven escuadra nacional. «Creo que se puede. Tabilo viene muy bien y Tomás también ahora último, así que por qué no. Además, ellos dos juegan muy bien dobles», destaca el otrora especialista en la modalidad, quien considera que ambos tienen que disputar todos los puntos de la llave.
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«Es una pena que Cristian no pueda estar y obviamente aún mayor por ‘Nico’ Jarry, pero a veces las cosas pasan impredeciblemente y ellos tienen el nivel para sorprender», prosigue el santiaguino, quien cita a Massú. «Nada es imposible, hueón. Ni una hueá», replica.
Para finalizar, respecto a los suecos, el capitalino advierte sus virtudes. «Los conozco muy bien. Son muy aguerridos, luchadores y buenos competidores», resalta sobre los hermanos Mikael y Elias Ymer, haciendo alusión a su ascendencia etíope.
