Rusia es el primero de los dos acusados en salir a replicar la acusación de la justicia estadounidense que indica que la organización de ese país para el mundial de 2018 pagó sobornos para quedarse con la sede de la más reciente Copa del Mundo de fútbol.
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La respuesta fue dada por el Kremlin, que negó tajantemente estos sobornos para adjudicarse la sede. “Rusia recibió de manera totalmente legal el derecho de organizar el Mundial. No está relacionado con ningún soborno, desmentimos eso categóricamente”, declaró un portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
“Rusia organizó el mejor Mundial de fútbol de la historia. Estamos orgullosos de ello”, añadió.
Rusia y Catar son apuntadas, según un documento publicado por el fiscal federal de Brooklyn, como pagadores de sobornos a dirigentes de la FIFA para quedarse con las sedes de los mundiales de 2018 y 2022.
Si bien hay rumores que aseguraban estos sobornos, éste es el primer documento que asegura la existencia de estos pagos. Por ahora, Catar no se ha pronunciado sobre la acusación.