El paso de Jorge Sampaoli por la selección argentina fue traumático. Su punto cúlmine fue la derrota en el Mundial de Rusia 2018 a manos de Croacia por 3-0, la cual generó un quiebre con el camarín.
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Esa caída empezó a gestarse luego de un grosero error de Willy Caballero, que permitió que Ante Rebic pusiera el 1-0. A casi dos años de ese encuentro, el arquero recordó su falla, que le costó el puesto.
Consultado en TyC Sports si él mismo se hubiese sacado de la oncena para el partido siguiente, indicó que «es difícil ser el entrenador y no puedo opinar en ese sentido. Sampaoli creyó que era lo conveniente, lo hizo y ya está. Si yo fuera fanático, lo hubiera mandado a la mierda, pero no soy fanático, vivo de esto y trato de respetar a mis compañeros, y el que entró hizo las cosas muy bien para jugar», en alusión a Franco Armani, quien atajó después ante Nigeria y Francia.
Preguntado por las duras críticas que recibió en su país, el hoy meta suplente del Chelsea explicó que «los argentinos tenemos una cuestión que no es de amor por los colores, sino de fanatismo y mediante el fanatismo hablamos o destruimos en cuestión de segundos. Y eso está mal».