Dele Alli se perderá la primera presentación del Tottenham al reiniciarse la Premier League de Inglaterra tras ser suspendido un partido por un comentario burlesco de tinte racista en redes sociales durante la pandemia de coronavirus.
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Alli colgó un video en una charla privada en Snapchat en febrero, con el centrocampista burlándose del virus y de un individuo asiático. Un medio británico recibió el video.
La Federación Inglesa de fútbol informó el jueves que Alli fue «imprudente al tratar de hacer un chiste», pero que el jugador «no tuvo la intención de insultar o crear un estereotipo racial». Alli fue declarado culpable de desprestigiar el deporte por hacer una manifiesta referencia de origen étnico.
El jugador inglés no podrá actuar en el partido del Tottenham contra Manchester United el 19 de junio. También recibió una multa de 50.000 libras (63.000 dólares) y deberá acudir a un curso educativo.
Alli había reconocido previamente que «quedé mal conmigo y el club», pero volvió a disculparse el jueves en un comunicado difundido poco después de darse a conocerse la decisión de la FA.
«Quisiera disculparme otra vez si mi conducta provocó algún tipo de afrenta», dijo. «Fue una broma de muy mal gusto sobre un virus que nos ha afectado mucho más de lo que nos hubiéramos imaginado», agregó.
«Estoy agradecido que la FA confirmó que mis acciones no tuvieron una intención racista, porque yo soy alguien que aborrece todo tipo de racismo. Tenemos que ser cuidadosos con las expresiones y acciones que hacemos y cómo pueden ser percibidas por otros», finalizó.
