Fue una final de infarto en la cuarta de seis carreras programadas en nueve días en Tempelhof, en Berlín. Jean-Eric Vergne aseguró su primera victoria de la temporada 2019-2’20, con António Félix da Costa terminando la carrera en segundo lugar. Así, el binomio de DS Techeetah se defendió de Sebastien Buemi, quien llegó tercero, para asegurar que el equipo francochino se llevara el segundo campeonato de marcas consecutivo, dándole al piloto portugués su primer título en la serie eléctrica y logrando el tercer cetro de conductores a la escuadra que, en las dos temporadas anteriores, había llevado a la cima a “JEV”.
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Da Costa se corona con una ventaja que nunca se había visto en la Fórmula E hasta ahora: 76 puntos sobre su compañero de equipo, Vergne, que ahora ocupa el segundo lugar, con 60 puntos por jugar. Ningún piloto había ganado el título con dos carreras por disputarse, y esto en su primera temporada como piloto del DS Techeetah.
El final para equipo no ha podido ser mejor. Se ha asegurado la victoria en cuatro de las últimas cinco competencias, incluidas tres en el final de temporada más intenso en la historia del automovilismo en el aeropuerto Tempelhof de Berlín, con las pole position incluidas.
Y, hasta ahora, ningún equipo en la historia de la Fórmula E ha visto a sus pilotos terminar primero y segundo en el ranking de pilotos, una posibilidad que se ve firme con dos carreras de la temporada aún por disputar en Tempelhof los días 12 y 13 de agosto.
«Estoy sin palabras. A veces he estado tan cerca de rendirme durante los momentos difíciles, y gracias a las personas que me rodean nunca lo hice. Estoy muy agradecido con estos muchachos que creyeron en mí y en mis capacidades, incluso cuando no estaba terminando ni cerca del podio. Muchas gracias a JEV (Jean-Eric Vergne), sé que esto es difícil para él, pero me empujó hasta el final y me ayudó mucho y es principalmente gracias a él que me instalé tan rápido en el equipo. Teníamos un plan y lo ejecutamos a la perfección. JEV y yo nos ayudamos mutuamente, pero fue muy intenso al final ya que tanto Seb como Oli siempre estuvieron allí. Todos fueron muy justos hoy y corrieron como los campeones que son», comentó Da Costa al terminar la carrera.
«Como equipo no podíamos soñar con un día mejor. Ganamos el campeonato de equipos, Antonio ganó el título de pilotos y yo salté al segundo lugar de la clasificación. Con dos carreras más para el final, mantendré la cabeza gacha y correré por el segundo lugar. Es un día fantástico y estoy muy orgulloso de ser parte de este equipo. Conozco la sensación que te golpea en la última vuelta justo antes de cruzar la bandera a cuadros y estás a punto de ganar tu primer campeonato. Probablemente sea el mejor momento en la vida de un piloto de carreras y Antonio debería disfrutar cada segundo», comentó Jean Eric Vergne.