Hoy es el “Día D”. O “Día U”, porque Carlos Heller debe decidir si finalmente venderá sus acciones de Azul Azul, cediendo el control de la concesionaria que administra los destinos de Universidad de Chile.
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En la casa de estudios están tan atentos como preocupados. El desconocimiento de los posibles compradores genera incertidumbre, como reconoce Carolina Coppo, una de las representantes de la “Casa de Bello” en el directorio azul.
La directora e hincha, quien desconocía la intención final del empresario, hace un balance de su gestión. La deuda marca la evaluación de una administración que este viernes podría llegar a su fin.
¿Se esperaban todo esto?
No, yo personalmente no me esperaba que fuese con tanta incertidumbre, llegar hasta el último día, sin saber a ciencia cierta qué va a pasar.
La posición de la universidad parece estar clara, Andrés Weintraub me decía que creía que estaban alineados con Heller, que no cree que le venda el club a cualquier persona…
Ésa es una opinión personal de Andrés, yo no tengo la certeza que tiene él. No creo que Carlos llegase a realizar una operación que pueda perjudicar al club, él jamás va a tener mala intención, pero la universidad está atenta y alerta a lo que pueda pasar, sin ser mucho lo que podemos hacer, más que advertir nuestras aprensiones. Pero bueno, Carlos, como cualquier accionista de cualquier sociedad anónima, vive de vender una acción en la cual invirtió al mejor comprador. Ahí es donde viene la evaluación más subjetiva de cuáles son los elementos que él va a considerar para discriminar.
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Claro, cualquiera puede decir “soy hincha, vengo con buenas intenciones”, pero, ¿cómo lo confirmas? Negocios son negocios…
La única manera es refiriéndose a personas que hayan estado previamente involucradas en el fútbol, con una conocida trayectoria de cercanía a la “U”. Ahora, esa confirmación es muy difícil. Yo creo que las buenas intenciones siempre están, en esta industria no se gana plata, nadie invierte a efectos de multiplicar su inversión, por el contrario, lo hace para ser un aporte al club al cual tú le tienes cariño. El problema no es cómo confirmar si la persona es hincha o no, sino que se le vendiese a alguien que reconocidamente no lo es.
No se gana plata, pero se puede ganar poder. El ejemplo de Sebastián Piñera en Colo Colo es emblemático…
Bueno, tienes a Piñera en Colo Colo, tienes a Macri en Boca, hay varios ejemplos. Efectivamente, el fútbol es una tremenda área de poder.
¿Puede ser que Heller haya armado este fondo de inversión, que prendió más de lo que pensaba y por eso se está arrepintiendo?
No creo, Carlos tiene otras razones, personales además, para querer vender. De todas formas, aun cuando estime que pudiese conservar las acciones porque ve que hay terceros que le ven un valor, igual estaría vendiendo a uno muy inferior al que compró. Él ha invertido mucho, de hecho, está en la deuda, entonces, mantenerse significaría seguir inyectándole dinero, a lo menos hasta que se equilibren las finanzas, de manera indefinida, habiendo sostenido que ya no estaba dispuesto a más. No me calza, a menos que los compradores tengan un plan estratégico del cual estén tan convencidos en que en un mediano o corto plazo pueden sacar al club adelante en lo deportivo y financiero, que se haya convencido de llevarlo adelante él mismo.
En términos globales, ¿qué te ha parecido su gestión?
Se puede dividir en varias etapas. Cuando él fue presidente, yo creo que la gestión fue regular, se cometieron muchos errores, el endeudamiento de la sociedad anónima se gestó en su administración, así que es una cuestión de números objetivos. Sin embargo, en el aspecto deportivo, creo que se tomaron buenas decisiones. En relación al último tiempo, yo lo califico como regular bajo la presidencia de Navarrete.
El hincha ve que se fueron todos esos fondos que se habían juntado en la época de las ventas millonarias, ve muy lejanos el estadio o armar un equipo potente…
Hubo un poco de eso también, la compra de Jara, la de Beausejour, con todos los jugadores que se compraron en esa época, efectivamente se gastó el dinero de las copas anteriores. Pero hubo también otros errores de gestión, que no son atribuibles a haber gastado tanto. Ahora, el tema del estadio, francamente, no son los recursos, sino la ubicación.
Comparando con la realidad nacional, y con otro club que está asociado a una universidad, ¿le gustaría que la “U” siguiera un modelo como el de la Católica, que va a agrandar el estadio y que arma planteles potentes para el fútbol chileno?
Yo creo que tenemos culturas distintas, aunque efectivamente hay varios aspectos positivos que deberíamos aprovechar como ejemplo. Pero ahí hay que tener una línea bien estricta, y ésa es una crítica que se le puede hacer a la gestión de Heller, para jugársela por los jugadores de la cantera, que es lo que hizo la Católica en los últimos años. Eso no sólo te genera un buen plantel, sino también posibilidades de venta. En la medida de que exista un compromiso real y una convicción en relación a un proyecto de esta naturaleza, los efectos positivos vienen de por sí.