El Calcio, donde intentan brillar Arturo Vidal y Alexis Sánchez, tuvo hace 101 años a un chileno peleando por el título. Paradójicamente, el Inter, donde actualmente conviven los dos astros nacionales, impidió que se coronara campeón italiano el Livorno de un compatriota, Félix Corte.
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Su historia es de película, una que mezcla el fútbol con la guerra. Hijo del inmigrante Felice Corte Da Forno y de la chilena Luisa Bórquez Patiño, nace en Valdivia el 4 de agosto de 1898 y entra a estudiar al Internado Nacional Barros Arana, donde destaca en atletismo, esgrima y, cómo no, en el balompié.
Ingresa al Club Atlético Internado, hoy Universidad de Chile, en 1914 y en aquella temporada juega por el tercer equipo, donde obtiene la Copa Excelsior de manera invicta, aunque debido a sus grandes cualidades es ascendido al segundo elenco en la siguiente campaña. En 1915 se consagra en la Copa Independencia, especie de segunda división de la Asociación de Football de Santiago, y en 1916 nuevamente es promovido, esa vez al cuadro de honor.
Sin embargo, hechos ocurridos en Europa cambiarían el curso de su vida. Italia se mantuvo neutral en la Primera Guerra Mundial hasta mayo de 1915, cuando el proyecto de futbolista aún no cumplía las 18 “primaveras”.
“¿Quieres ir a defender la patria de tu padre?”, le preguntó el progenitor. La respuesta fue afirmativa y se enlistó como voluntario, falsificando documentos, pues todavía era menor de edad.
En el campo, el de batalla, cae herido por una bala de fusil que le penetró la mejilla derecha para salir por la parte posterior de la mandíbula. Una vez recuperado vuelve al frente, donde conoce a Bruno Iacoponi, con quien se reencontraría en la Unione Sportiva Livorno en 1919, cuando se reorganiza el Calcio.
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En la Prima Categoría, su escuadra, donde brilla como delantero titular indiscutido, remata como escolta de la zona centro-sur, sólo por detrás de su archirrival, el Pisa. Así, clasifica a otro grupo de tres equipos, donde gana todos sus encuentros ante el Audace Roma y el Internazionale Napoli, lo cual le permite disputar la final zonal frente al Fortitudo Roma, al que vence por 3-2.
De esta forma, los “Amarantos” acceden a la definición del Calcio. A partido único, el 20 de junio, jugando con un hombre menos desde los siete minutos y habiendo terminado 3-0 abajo el primer tiempo, casi firman una remontada épica contra el Internazionale de Milán, pero en definitiva pierden por 3-2.
Luego, el crack volvería a nuestro país, donde seguiría defendiendo al Internado, que ganaría la Copa Chile de 1921, la primera corona de la institución. Posteriormente, en 1923 pasaría a Audax Italiano, del que sería capitán y al cual traería a Bruno Iacoponi y a su hermano Gino, con quien también forjó una estrecha amistad en el Livorno, y juntos se proclamarían en el campeonato de la máxima categoría de 1924.
En ese año se daría el lujo de representar a la Selección en un par de amistosos con Uruguay. Tras un paso por Punta Arenas, donde defiende al Club Deportivo Scout, regresa en 1927 a la capital, donde se retira en 1928 en los audinos, dándole un Corte a una carrera de película.
La carrera de Corte, con el Calcio como punto máximo
Club Atlético Internado / 1914-1916
Primera Guerra Mundial / 1916-1918
Unione Sportiva Livorno / 1919-1920
Club Atlético Internado / 1921
Sin club / 1922
Audax Italiano / 1923-1925
Club Deportivo Scout / 1925-1926
Audax Italiano / 1927-1928
Fuente: Asifuch